Revive la presión hispana hacia el Tesoro federal
Ocho demócratas del Congreso piden más atención a la crisis fiscal de Puerto Rico
WASHINGTON.- En nueva carta al secretario del Tesoro, Jacob Lew, ocho demócratas latinos del Congreso intensificaron ayer la presión para que tome un papel más activo en favor del acceso de las empresas públicas de Puerto Rico al Código federal de quiebras y acepte servir de intermediario entre las autoridades y los bonistas en busca de la reestructuración de la deuda pública puertorriqueña.
Justo cuando empiezan los eventos del mes de la herencia hispana en Washington, la carta fue promovida por la congresista Nydia Velázquez (Nueva York).
Los firmantes incluyen a su colega boricua José Serrano (Nueva York), el senador Robert Menéndez (Nueva Jersey), el líder de la minoría en el Comité de Recursos Naturales de la Cámara baja, Raúl Grijalva (Arizona), Rubén Hinojosa (Texas), Tony Cárdenas (California), Albio Sires (Nueva Jersey) y Grace Napolitano (California). LA EXPERIENCIA AUTOMOVILÍSTICA. Los legisladores recordaron a Lew cómo el mismo Tesoro federal rescató la industria automovilística es- tadounidense en medio de la crisis financiera de finales de la pasada década.
“No hay ninguna razón por la que no puedan tener un papel similar en este asunto, sentándose con las instituciones que controlan una gran cantidad de la deuda de Puerto Rico y animándolas a ordenar una solución razonable, en vez de tratar de sacar provecho de los problemas del Estado Libre Asociado (ELA)”, dijo Velázquez.
En la carta, los congresistas afirmaron que “para prevenir una catástrofe económica, recomendamos que el Tesoro vaya más allá de la asistencia técnica y tome un papel de liderato para traer hacia la mesa a los acreedores y deudores, como hizo en la crisis financiera de 2008”.
Durante el receso legislativo de agosto, Velázquez y Serrano también escribieron al secretario Lew. Velázquez y el boricua Luis Gutiérrez (Illinois) han dirigido misivas independientes al presidente Barack Obama.
ASUNTO DEL CONGRESO. En julio, la secretaria adjunta para Asuntos Legislativos del Tesoro federal, Anne Wall , contestó a Velázquez la carta al presidente Obama, en la que reconoció que “la situación fiscal de Puerto Rico es urgente”, aunque afirmó que cualquier iniciativa le corresponde al Congreso.
Mientras se limitan a ofrecer asistencia técnica y hacer expresiones periódicas a favor del acceso de la Isla al capítulo 9, tanto el Tesoro como la Reserva federal han descartado que un impago de la deuda pueda tener un efecto sistémico en el mercado financiero estadounidense.
Los ocho demócratas hispanos del Congreso alentaron a Lew a presionar directamente a los presidentes de los comités de lo Jurídico del Senado, Charles Grassley (Iowa), y de la Cámara de Representantes, Robert Goodlatte (Virginia), ambos de la mayoría republicana que ha frenado los proyectos sobre el capítulo 9.
DESDE LA ACADEMIA. Por otro lado, en un artículo de opinión en The New
York Times, los profesores de Derecho Clayton Gillette, de la Universidad de Nueva York (NYU), y David Skeel, de la Universidad de Pensilvania, subrayaron ayer que el reordenamiento de la situación fiscal de la Isla requiere del acceso al capítulo 9 y de una junta de control fiscal como la que ha propuesto el gobernador, si tiene “dientes suficientes” .
“La mejor forma de revertir la crisis y fortalecer la cada vez más fluida base fiscal del ELA es otorgarle ac- ceso a las entidades municipales puertorriqueñas a la ley de bancarrota y asegurar que cualquier junta de control fiscal tenga la autoridad que necesita”, indicaron los profesores estadounidenses.