Obama se excusa con Médicos Sin Fronteras
La ONG afectada reclama una investigación sobre si el bombardeo del hospital fue un crimen de guerra
WASHINGTON - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pidió disculpas ayer a Médicos Sin Fronteras por el bombardeo estadounidense a un hospital de la organización en Kunduz (Afganistán), mientras evalúa cambios a su plan de reducir las tropas en ese país a una presencia mínima en 2017.
Las disculpas, transmitidas por Obama en una conversación telefónica con la presidenta de Médicos Sin Fronteras, Joanne Liu, se produjeron el mismo día en que la organización pidió que una comisión independiente establezca la verdad de lo sucedido en el ataque.
Los responsables de Médicos Sin Fronteras trabajan actualmente con la presunción de que el bombardeo del hospital fue un crimen de guerra. Además, han desmentido las versiones de Afganistán de que en el hospital había terroristas y desde allí se estaba atacando a sus fuerzas, razón por la que se pidió a Estados Unidos efectuar el bombardeo.
La Casa Blanca explicó que, durante la llamada a Liu, Obama garantizó que la investigación sobre el ataque que está realizando el Departamento de Defensa será “transparente” y ofrecerá un relato “objetivo” de los “hechos y circunstancias” que desencadenaron el bombardeo.
Además, Obama se ha comprometido a estudiar las “reformas” necesarias para que este tipo de “tragedias” sean “menos probables” en el futuro, según detalló el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
“Cuando Estados Unidos comete un error, asumimos la responsabilidad y nos disculpamos si es necesario”, remarcó el portavoz de Obama.
No obstante, Earnest eludió varias preguntas acerca de si Estados Unidos va a aceptar la investigación internacional solicitada por Médicos Sin Fronteras e insistió en destacar las pesquisas ya abiertas por el Pentágono, el gobierno afgano y la OTAN.
Desde Nueva York, Médicos Sin Fronteras tomó nota de las disculpas de Obama por el bombardeo, pero le insistió en que respalde una investigación internacional sobre la tragedia. “Reiteramos nuestra petición para que el Gobierno de Estados Unidos acceda a una investigación independiente liderada por la comisión humanitaria internacional para establecer lo que ocurrió en Kunduz, cómo ocurrió y por qué ocurrió”, dijo la presidenta de Médicos Sin Fronteras.
El director ejecutivo de MSF en Estados Unidos, Jason Cone, subrayó la importancia de que el gobierno de Obama dé su consentimiento a esa comisión, porque así “enviaría una poderosa señal” de su compromiso con “el respeto de la ley humanitaria internacional".