Guillermo Francella “A veces nos íbamos todos a casa afectados con lo que estábamos filmando”
ENTREVISTA CON EL ACTOR ARGENTINO, PROTAGONISTA DEL FILME “EL CLAN”
El drama argentino “El Clan” se estrena hoy en Puerto Rico luego de una jornada triunfal que comenzó este pasado mayo en el Festival de Cine de Cannes y que parece destinada a culminar en la categoría de mejor filme en lengua extranjera en la próxima ceremonia de los Oscar. La película dramatiza los eventos reales de una familia convencional que resultó ser responsable de una ola de secuestros que sacudieron a Argentina a finales de los setenta. Durante una breve pero agradable charla telefónica el actor Guillermo
Francella , quien recientemente ha sido un recurso clave para filmes como “El atraco” y “Corazón de león”, habló sobre su conexión personal con esta historia y por qué el personaje de Arquímides Puccio ha sido el más complejo de su carrera.
“El Clan” presenta eventos verídicos que marcaron la historia moderna de Argentina. ¿Cuán familiarizado estabas con los crímenes de la familia Puccio antes de hacer el filme?
GF- Tenía mucho conocimiento porque da la casualidad que yo de niño vivía en la misma zona que los Puccio. Yo vivía en la zona de San Isidro con mis papás y mis hermanos. Iba al colegio muy cerca de la casa de los Puccio. Caminé cientos de veces por al frente de la puerta de su casa sin saber que el delito estaba ahí adentro. Esto fue durante los setenta. Así que fue un caso del cual conocía mucho porque todos quedamos perplejos cuando esta familia “cuasi normal” fue arrestada por estos crímenes. Una familia que tiene su propio negocio donde le vende comida a los vecinos, hijos jóvenes, deportistas. Un jefe de familia muy afable con sus vecinos, que iba a la iglesia todos los domingos y con una cotidianidad absoluta. Así que cuando los apresaron todos dijimos: ‘Pobre gente. Seguramente deben haber otros culpables’. Nadie podía creer en la culpabilidad de esta gente. Así que cuando se probó que toda la evidencia apuntaba hacia ellos fue algo muy impactante. No podíamos creerlo. Su culpabilidad absoluta fue algo bien fuerte.
¿Cambia tu proceso como actor cuando te estas preparando para darle vida a una historia verídica?
GF-No. Por ser verídica no fue diferente en la forma que preparé el papel. Lo que sí fue diferente es que tuve que componer un personaje difícil. Porque no había muchos ele- mentos para poder observarlo. Cómo caminaba o hablaba. No había vídeos de la época que estábamos dramatizando. Sí había vídeos de cuando lo meten en un coche policial, pero nunca hablando. Nunca supimos cómo se expresaba. Así que construirlo fue complejo y requirió de mucha investigación. Hablamos con los jueces del caso, con familiares de las víctimas, con amigos de sus hijos y así lo fuimos construyendo.
Dentro de ese proceso de investigación, ¿qué te sorprendió sobre la contradicción entre sus crímenes y la vida cotidiana que tenía?
GF- Pues explorar esas características desde un nivel actoral es algo muy jugoso. Vivir su cotidianidad de ayudar a su hija con las tareas escolares y luego realizar los delitos que realizaba fue un reto bien atractivo. Pero lo que me tomó por sorpresa fue el agobio emocional que me generaron muchas de esas escenas. No fue sencillo esa parte del proceso. A veces nos íbamos todos a casa afectados con lo que estábamos filmando.
¿Es la primera vez que te pasa eso con un personaje?
GF- Sí. No es que no pudiera abandonarlo fuera de la filmación, pero definitivamente me trastocó a nivel emocional de una forma muy fuerte.
¿Cuál fue la clave para poder encontrar tu interpretación?
GF- Su mirada. Quería que la mirada de Arquímides fuera muy peculiar. De alguien que lo observa todo porque esta haciendo algo y construyendo una mentira. De alguien que se toma su tiempo y pausa porque tiene que pensar bien lo que va a contestar. Esa fue la forma en que yo pude entrar con este personaje.
“El Clan” es parte de una nueva ola de cine argentino que ha tenido mucho éxito tanto a nivel internacional como en Argentina. Tú has sido parte de varias de ellas, como “El secreto de sus ojos” y “Corazón de león”. ¿Crees que ha cambiado el tipo de cine que se está haciendo en tu país o es la receptividad del público al cine nacional lo que ha cambiado?
GF- El público argentino va a ver cine argentino cuando le das películas de calidad o cuando ve cosas con las que se puede identificar a nivel emocional. Yo he tenido el apoyo del público en diferentes facetas, pero no hay nada como cuando una película cala hondo con la masa. Eso fue algo que experimenté por primera vez con “Corazón de león”.