Nace nuevo colectivo teatral
Histeria Colectiva es una compañía artística formada por jóvenes menores de 25 años
Al otro lado del teléfono una voz entusiasta saluda y con ella se asoma la esperanza. Es el joven puertorriqueño Luis Ra Rivera, un actor, quien el pasado mes de mayo fundó junto a otros colegas universitarios la compañía teatral Histeria Colectiva.
Ninguno de los integrantes del grupo llega a los 25 años y ya están generando empleos y buscando la forma de crear una compañía teatral sólida y autosuficiente con la que le puedan ofrecer trabajo a otros colegas.
“Sí podemos vivir en esta crisis y podemos darnos trabajo a nosotros mismos”, aseguró Rivera en una entrevista con El Nuevo Día.
Esa fue su manera de resumir una de las razones de por qué surgió Histeria Colectiva, una compañía teatral que integra junto a Gabriela Saker, Sebastián Borges, Daniel Alicea y Joshua Rivera.
Luis Ra Rivera relató que ante la falta de taller para los talentos más jóvenes, su amigo Daniel Alicea le propuso crear un grupo teatral. Juntos comenzaron a darle forma a la idea y llamaron a otros amigos que, a su vez, contactaron a otros allegados para que se unieran al proyecto.
“Algunos no nos conocíamos y nos dimos cuenta en el proceso que éramos bien diferentes y teníamos concepciones del teatro diferentes. A pesar de que al principio eso nos preocupaba, ha sido una gran fortaleza porque nos hemos nutrido de diferentes miradas”, expresó Gabriela Saker, única mujer del grupo.
“La verdad es que no sabíamos a lo que nos íbamos a enfrentar porque no es lo mismo que te llame un director para que participes en una obra a uno producirla. La realidad es que ha sido un reto, pero aunque sea difícil, se puede”, agregó Rivera, quien junto al resto sus compañeros ha enfrentado la crisis con creatividad.
Histeria Colectiva, según sus integrantes, tiene el propósito de desarrollar un teatro comercial con piezas de alta calidad artística con las cuales el público pueda identificarse. También desea brindarle a los espectadores una experiencia única, haciéndolos parte del proceso creativo.
“Acuñamos el término de teatro 360 porque desde que entras a la sala del teatro estás en la pieza. No queremos que el público se sienta solo a observar, sino que tenga un papel más activo a la hora de enfrentarse a una pieza”, explicó Saker.
EL MÉTODO. Para entender mejor hacia dónde se dirige Histeria Colectiva con su propuesta, el grupo invita al público a la obra teatral “El método”, del dramaturgo español Jordi Galcerán. La pieza, que es la primera que presenta este colectivo, estrenó el pasado fin de semana y continúa este sábado y domingo, en el Teatro Victoria Espinosa en Santurce.
Esta obra narra la historia de cuatro aspirantes al único puesto vacante de la empresa Dekia, que apuesta a métodos de selección de personal poco convencionales. Los ambiciosos ejecutivos que asisten a la entrevista se enfrentarán cara a cara para luchar por ese prestigioso puesto, sin saber que sus habilidades y capacidades profesionales se pondrán a prueba de la forma más extrema posible.
“El método” es dirigida por Joshua Rivera Avilés e interpretada por el resto de los miembros de Histeria Colectiva. Para este montaje el grupo ha transformado completamente la sala teatral, convirtiéndola en la compañía multinacional Dekia. Con esto se quiere que el espectador se adentre en la pieza desde el comienzo.
Más allá de la risa y la intensa trama, la obra presenta temas cercanos a los puertorriqueños, como la crisis económica, el desempleo y los riesgos que se pueden llegar a tomar para conseguir un puesto soñado.
“Además de que el texto es riquísimo, nos parecía que podía ser una obra interesante para el público puertorriqueño y para nosotros mismos que (antes de Histeria Colectiva) estábamos buscando nuestros propios empleos”, mencionó Saker.
Esta obra es una buena introducción para una compañía teatral que apostó a la posibilidad en tiempos de estrechez económica y desasosiego.
“Queremos ayudar a crear una industria sólida que permita a los actores, diseñadores, técnicos y dramaturgos, tener una plataforma constante de trabajo”, indicó Saker, quien al igual que el resto de los “histéricos”, seguirá laborando y creando propuestas artísticas para desarrollar una industria teatral, donde haya un diálogo entre los colectivos que hoy apuestan a la esperanza.