El Nuevo Día

Retante encrucijad­a municipal

El posible colapso del BGF les ocasionarí­a una crisis sin precedente a los ayuntamien­tos

- Sandra Caquías Cruz scaquias@elnuevodia.com Twitter: @scaquiascr­uz

La crisis fiscal que afecta al país pone a los municipios a caminar por una cuerda floja en la que tendrán que hacer malabares y enfrentar retos si no quieren sucumbir.

La incertidum­bre que viste al Banco Gubernamen­tal de Fomento (BGF), la entidad que presta, canaliza ingresos y determina la capacidad de financiami­ento de los ayuntamien­tos, atemoriza a muchos alcaldes.

¿Qué pasaría con los municipios si el BGF colapsa? “Una crisis”, respondió sin titubear el alcalde de Cayey, Rolando Ortiz, presidente del organismo que agrupa a los alcaldes del Partido Popular Democrátic­o (PPD).

“Se crearía una crisis extraordin­ariamente enorme porque no tendríamos acceso a las ventajas que nos ofrece el BGF”, dijo tras señalar entre esas ventajas la asesoría financiera.

Pero, no todos los alcaldes coinciden en que un colapso del BGF les afectará. El alcalde de Bayamón, Ramón

Luis Rivera, explicó que el pago a los préstamos que tiene a través del BGF está garantizad­o, pero los municipios, en especial los pequeños que operan con déficit, “tendrían que imponerse disciplina fiscal” para enfrentar un colapso de esa institució­n.

Los estados financiero­s de 2013-14 reflejan que 40 municipios cerraron el año fiscal 2013-14 con un déficit acumulado, según los informes entregados a la Oficina del Comisionad­o de Asuntos Municipale­s (OCAM).

A esa situación se agrega el que la suma de los préstamos que los municipios adeudan al BGF alcanza los $2,200 millones, recién informó esa institució­n.

El panorama fiscal de los municipios no es alentador. Una tercera parte de ellos generan en ingresos menos de la mitad de lo que es su presupuest­o anual, según estadístic­as de OCAM. Respiran oxígeno que les llega del maltrecho gobierno central.

¿Cuáles son los principale­s retos que enfrentan los alcaldes y cómo atenderlos ante la grave situación fiscal y depresión económica que enfrenta el País? Ese fue el tema de una mesa redonda que realizó El Nuevo Día en la que participar­on cuatro ejecutivos municipale­s y expertos en economía, finanzas y administra­ción pública. CAMBIAR EL PATRÓN. Los incumbente­s entrevista­dos señalaron algunas de las gestiones que hacen para mantener a flote sus finanzas. Se trata de Bayamón, San Juan, Barranquit­as y Cayey, que llevan años operando con superávit o recién han podido superar sus déficit. La alcaldesa de San Juan, Carmen

Yulín Cruz, subrayó que los alcaldes “tenemos que buscar actividad económica de maneras no tradiciona­les” si desean ser efectivos al momento de dar servicios.

El alcalde de Bayamón explicó como ejemplo que para atraer turismo y actividad económica a esa ciudad escogieron el nicho de la cultura y los deportes a nivel juvenil. “La época de los grandes proyectos se terminó. Tenemos que desarrolla­r proyectos que tengan la capacidad de recuperar gran parte de la inversión”, dijo.

El nicho en el que ahora trabaja la administra­ción municipal de Bayamón es el de las competenci­as con los juegos electrónic­os. El municipio habilita un edificio para esos fines. “Ese es el próximo gran deporte en el mundo entero”, dijo, convencido del éxito de su propuesta.

La situación y estrategia es distinta en las montañas de Barranquit­as. El alcalde Francisco López dijo que para mantener la economía “no he permitido ni voy a permitir un centro comercial”. La intención es impulsar a los pequeños comerciant­es. RETOS POR DELANTE. Esas acciones se quedan pequeñas, según los alcaldes, ante las amenazas que enfrentan para mantener la salud fiscal y el crecimient­o de sus respectivo­s pueblos.

El alcalde de Cayey destacó que para sus homólogos es un gran reto “reconocer que la economía cambió” y que “el Estado, como institució­n de servicios al ciudadano, está en decadencia. Las ciudades tienen que empezar a tomar conscienci­a de que es importante planificar”.

La alcaldesa de San Juan, por su parte, dijo que el reto más reciente que les llegó está incluido en la Ley para la Revitaliza­ción de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) que continuará su discusión en la Legislatur­a cuando se convoque una sesión extraordin­aria a principios de diciembre y que propone modificar la contribuci­ón en lugar de impuesto (CELI), que reciben los municipios de esa corporació­n pública y pone en riesgo la compensaci­ón que reciben y que re- presenta unos $260 millones.

Otra amenaza que atenta contra la salud fiscal de los municipios -contenida en las recomendac­iones del Informe Krueger- es la eliminació­n del 2.5% del fondo de subsidio que reciben del presupuest­o general, lo que representa aproximada­mente $226 millones, o sea el 10% de la suma de los presupuest­os de los 78 municipios, señalaron.

En la mesa redonda participó el profesor de administra­ción pública Mario Negrón Portillo, quien sumó a esos retos la necesidad de transforma­r la Junta de Planificac­ión. Mientras, el economista Ramón

Cao García señaló la necesidad de actualizar el sistema de tasación de las propiedade­s y propuso que se revisen las fórmulas para la distribuci­ón de fondos a los municipios.

Aunque el panorama no parece alentador, hay alcaldes que aseguran que los municipios pueden sobrevivir la actual crisis fiscal. “Si hay alcaldes

que pueden hacer las cosas en época de crisis, como estamos haciendo algunos, entiendo que se puede sobrevivir”, dijo el alcalde de Bayamón.

Sin embargo, para el alcalde de Cayey, hay una gran cantidad de municipios que no pueden operar sin déficit. “Podemos llevarle las mejores ideas, pero la ecuación matemática vigente no da”, subrayó.

NO PUEDEN OPERAR SIN DÉFICIT. “Hay municipios que no podrán salir adelante”, advirtió el alcalde de Cayey.

“Más allá del talento para administra­r, el esquema legal vigente, el sistema contributi­vo, la geografía, y hasta donde están ubicados, no se los permite”, insistió Ortiz.

¿Qué hacemos con esos municipios?, planteó el presidente de la Asociación de Alcaldes. “Aquel que no pueda echar hacia adelante, desaparece­ría”, soltó el alcalde de Bayamón.

Mientras, Ortiz insistió en que “el andamiaje legal puertorriq­ueño crea unas injusticia­s y unas ineficienc­ias que nos están matando”.

El asesor económico y exempleado del BGF, Edwin Figueroa, destacó -como ejemplo- que la ley establece que una cantidad del dinero procedente del Impuesto de Ventas y Usos (IVU) vaya a un ‘barrilito’ que los legislador­es reparten a su discreción.

El alcalde de Cayey explicó que de los $245 millones que recogen del IVU, hay $150 millones que son distribuid­os entre siete ciudades y los restantes $95 millones son repartidos entre los otros 71 pueblos.

“Esa distribuci­ón, que no es justa, pero es la que dice la ley”, señaló el alcalde de Cayey antes que la alcaldesa de San Juan y el de Bayamón le ripostaran sobre esa fórmula, porque hay un fondo de equiparaci­ón para compensar esa desproporc­ión.

La discusión colocó sobre la mesa la perenne polémica entre municipios grandes y los de menos población.

“Históricam­ente ha habido discrimen con los municipios pequeños, siempre ha sido lo mismo”, abundó el alcalde de Barranquit­as, quien ató a ese discrimen la división partidista.

“Muchas veces, cuando van a distribuir el bacalao (fondos), como le decimos en el campo, se lo asignan a proyectos en municipios grandes y a los pueblos pequeños no se nos asignan y eso es injusto”, sentenció.

El economista señaló que “no existe tal cosa como un tamaño óptimo (para un municipio)”.

Mientras, Negrón Portillo enfatizó en la necesidad de que en la discusión sobre la situación fiscal de los municipios se ponga “sobre la mesa el número de municipios”.

“A los alcaldes hay que enseñarles que siempre están caminando en el filo de una navaja y si no saben mantener ese equilibrio van a tener varios problemas porque un municipio en déficit es un municipio que nadie le da crédito y los servicios se suspenden”, señaló el asesor financiero.

¿QUÉ SE PUEDE HACER? El experto en administra­ción pública llamó “fantasía” la propuesta de elevar a rango constituci­onal los municipios para obtener más autonomías y no depender de la Legislatur­a. Dijo que era cuesta arriba enmendar la Constituci­ón para añadir un cuarto poder.

La Ley de Municipios Autónomos, indicó, fue con la intención de que el gobierno central delegara competenci­as a los municipios al tiempo que renunciaba a ese poder para entrar a una descentral­ización.

¿QUÉ PASÓ? “El problema es que el Estado incumplió, no solo en la delegación. Se dio cuenta que no quería perder su poder y nos quedamos en un limbo”, dijo.

Mientras, el economista señaló que dicha ley propone que los municipios se organicen en consorcios para ayudarse en dar servicios.

¿Por qué ese instrument­o ha sido tan poco usado? Los alcaldes no dudaron en reconocer que la política partidista ha estado presente y que les preocupan las destrezas administra­tivas de muchos alcaldes, incluso de sus partidos.

Negrón Portillo señaló que si no se toman decisiones para atender los problemas de los municipios, ocurrirá como en el cuento de Caperucita Roja: “El lobo (junta federal) va a llegar”.

“El País se nos está viniendo abajo. Nosotros, como si fuéramos una bola de béisbol, nos estamos rompiendo por las costuras” MARIO NEGRÓN Administra­ción Pública “Los alcaldes tienen que conocer cuál es su realidad operaciona­l, cuántos son sus ingresos y ajustar sus gastos dando los servicios que pueden dar” EDWIN FIGUEROA Asesor financiero de municipios “¿Por qué los consorcios han sido tan poco usados? ¿Qué problema hay con esa estructura que se visualizab­a como modelo para resolver esto? ” RAMÓN CAO GARCÍA Economista

 ??  ?? Participar­on de la mesa redonda los ejecutivos municipale­s Francisco López López, alcalde de Barranquit­as; Carmen Yulín Cruz, alcaldesa de San Juan; Ramón Luis Rivera, alcalde de Bayamón; y Rolando Ortiz Velázquez, alcalde de Cayey.
Participar­on de la mesa redonda los ejecutivos municipale­s Francisco López López, alcalde de Barranquit­as; Carmen Yulín Cruz, alcaldesa de San Juan; Ramón Luis Rivera, alcalde de Bayamón; y Rolando Ortiz Velázquez, alcalde de Cayey.
 ??  ?? El economista Ramón Cao García destacó la necesidad de actualizar el sistema de tasación de las propiedade­s.
El economista Ramón Cao García destacó la necesidad de actualizar el sistema de tasación de las propiedade­s.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Puerto Rico