El Nuevo Día

ENTRENAMIE­NTO POSITIVO

Consejos para lograr que tu perro haga sus necesidade­s en lugares adecuados

- Texto Mónica Ferrer Especial para Por Dentro

Si tu perro se pasa dejándote sorpresas desagradab­les, no te desesperes. Es posible determinar la causa y encontrar la solución para que deje de hacer sus necesidade­s en lugares inapropiad­os. Según los expertos, puede ser un problema de comportami­ento o médico.

Una historia detallada es clave para descifrar la causa. Dónde y cuándo esto sucede, qué hace la mascota cuando se le da la oportunida­d de ir al exterior, la postura cuando está eliminando, qué come y bebe el perro, y condicione­s médicas o medicament­os son algunas de los puntos importante­s que debes tener en cuenta.

Además de un examen físico completo podrían ser necesarios otros estudios, como un examen de sangre, un panel químico, análisis de orina y de heces, podrían ser necesarios. Si se determina que hay una condición médica que pueda ser la causa para este problema, el tratamient­o a la condición los resolvería.

Entre otras causas, también podría deberse a que la mascota ha tenido un entrenamie­nto incompleto, orina cuando están excitados, para marcar territorio, desórdenes de ansiedad y desorden cognitivo. La raza del perro también podría jugar un rol. Por ejemplo, las razas más pequeñas tienen más probabilid­ad de demostrar este comportami­ento.

No se considera que un perro está completame­nte entrenado hasta que han pasado de cuatro a ocho semanas consecutiv­as sin ensuciar el hogar. Por eso, si el entrenamie­nto no está completado, manejar el ambiente del perro y construir la relación son dos maneras de atender el comportami­ento.

Técnicas de manejo incluyen confinar al perro lejos de las áreas sucias usando jaulas, portones o un corral, supervisió­n activa, bloqueo de acceso al área preferida de la mascota en el hogar, y limpiar las áreas sucias minuciosam­ente y adecuadame­nte. Es recomendab­le usar un limpiador enzimático, el cual funciona rompiendo el olor de la orina y excreta para que la mascota no la pueda detectar y de tal manera, no estará motivado a ensuciar el área en el futuro. Se sugiere que limpie un área más amplia de la que cree ha sido ensuciada para estar seguro que se cubre todo lo que ha sido previament­e marcada por la mascota. Si no usa un limpiador enzimático, el problema podría persistir aun si la razón es una médica.

Construir una buena relación con la mascota es clave cuando se trabaja con un perro que aún no está entrenado. Evite cualquier tipo de castigo, lo cual solo sirve para ponerle más estrés al perro. En vez, use la técnica de refuerzo positivo, el cual puede ser tan sencillo como darle una pequeña galletita una vez haga sus necesidade­s en el exterior.

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Modificar el comportami­ento usando refuerzo positivo es parte de una estrategia efectiva.

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