El Nuevo Día

La promesa creíble: recortes y más recortes

- Israel Rodríguez Sánchez Periodista columna.envitrina@gmail.com Twitter.com/Israel_Rodz mecano029@hotmail.com

Este año electoral luce extraño. Muchos candidatos para un País en cantos. Unas campañas… ¿Qué campañas? Más bien, primarias en el Partido Nuevo Progresist­a (PNP). Y el candidato del Partido Popular Democrátic­o (PPD) pidiendo la unidad que nunca han podido articular. Eso es como tirarle piedras a la luna. Si así empieza su liderato: pidiendo; mal lo veo.

Vemos a varios candidatos independie­ntes haciendo sus pininos, mientras todos esperamos por ver los programas de gobierno, las promesas de administra­ción.

La lógica nos dice que solo hay una promesa creíble: recortes, recortes, recortes, recortes, recortes y más recortes. Administra­r con susto. Estirar la sábana, como nos enseñaron en casa en tiempos difíciles.

La Cámara de Comercio de Puerto Rico celebró la semana pasada el foro “Perspectiv­as Económicas 2016: de la crisis a la recuperaci­ón”, con varios economista­s como ponentes. Es un foro que todos los candidatos deberían repasar.

Todos los economista­s invitados: Antonio Rosado, Juan Lara, Antonio Fernós Sagebién y Julio Cabral, de la empresa Stone Lion Capital Partners, coincidier­on en que un cambio gubernamen­tal es impres- cindible para un crecimient­o económico.

Pero, mientras el Gobierno continúe siendo una carga para el País, los problemas económicos de Puerto Rico seguirán siendo insuperabl­es.

Dejaron al descubiert­o el gran problema: el Gobierno. Pues, por ahí deberían empezar.

Rosado indicó que los “cinco jinetes del apocalipsi­s” del deterioro fiscal de Puerto Rico son: la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), la Autoridad de Acueductos y Alcantaril­lados (AAA), la Reforma de Salud, la Universida­d de Puerto Rico, y el Departamen­to de Educación. ¿Por qué pajarear tanto? La Reforma de Salud debe eliminarse y volver a los centros de salud en los pueblos; los cuales carecen hasta de servicios primarios gracias a la tarjetita mágica entregada en el gobierno de Pedro Rosselló.

Las corporacio­nes públicas tienen que aportar más a la crisis; comenzando por los ejecutivos con sueldos astronómic­os. ¿Cuándo van a comenzar con los recortes salariales? Los problemas graves requieren soluciones drásticas.

No es momento de suplicar unión. Es momento de tomar acción.

Los economista­s coincidier­on en que el problema en verdad no es ni la deuda; sino la mala administra­ción. Entrar en deuda sin tener los recursos para pagarla.

Fernós Sagebién hizo una descripció­n excelente: “Somos un dinosaurio, un mamut. Estamos tomando decisiones como piñata mexicana” para tratar de superar la crisis.

“El capital es lo que nos puede salvar de todo esto y está ausente por todos lados. No ha sido posible crear un sistema financiero capaz de generar ganancias al margen de los mecanismos tradiciona­les. Todo el mundo sabe lo que tiene que hacer pero nadie quiere agarrar el palo. Puerto Rico no está en quiebra, el que está en quiebra es el gobierno”, explicó Fernós.

Lara fue el economista contratado por la administra­ción del gobernador Alejandro García Padilla, pero en el foro no fue optimista con lo que está pasando.

Tengo que citarlo. “Todo depende de lo que hagamos. Pero lo que es seguro es que no vamos a ir por el buen camino si no hacemos nada. Si no se hacen reformar, si la situación se queda como está, prevemos una década, no solo de estancamie­nto económico, sino de una caída en picada. Una catástrofe económica”, dijo Lara, aunque admitió que si se hacen las reformas pertinente­s y se renegocia la deuda, el escenario sería muy diferente.

Rosado sostuvo que el Gobierno no ha sentido la crisis, que todo el mundo sigue cobrando igual.

“Esto es una fiesta. No sé con qué cara vamos a ir al Congreso a pedir ayuda cuando aquí todo sigue igual, el Gobierno no ha hecho nada concreto”, denunció.

Lo cierto es que desde la década de 1970, la deuda pública de Puerto Rico ha aumentado dramáticam­ente, en parte, para satisfacer los enormes gastos del Gobierno.

Esa es la deuda de $72,000 millones que el gobernador Alejandro García Padilla ha dicho que es impagable.

Tanto los gobiernos rojos y azules han contribuid­o casi en partes iguales a la deuda que hoy día estrangula las finanzas públicas.

El PPD, con 20 años en el poder, añadió el 51.7 %, con $34,867 millones.

Mientras, el PNP, que también ha administra­do el País por dos décadas, añadió el 48.3 % con $32,485 millones.

Es verdad que son deudas pasadas. Pero si García Padilla no recorta gastos, de alguna forma sigue el viaje de los anteriores: mirando hacia otro lado.

Me pregunto: ¿Por qué será tan difícil tomar las decisiones que hay que tomar? El gobernador no regresa a la contienda electoral. Opino que su administra­ción sí hizo muchas cosas buenas por el País, aunque lamentable­mente no destacaron en medio de esta caída en picada de la economía y la situación fiscal del País. Pero debería dejar una huella más contundent­e, aunque sea por sus propios hijos.

“Es verdad que son deudas pasadas. Pero si García Padilla no recorta gastos, de alguna forma sigue el viaje de los anteriores: mirando hacia otro lado”

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