Un IVA para los Estados Unidos
Ted Cruz, uno de los dos principales candidatos presidenciales republicanos, tiene como eje central de su plataforma económica la implantación de un Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) a través de los Estados Unidos. Es decir, Ted Cruz quiere que los EE.UU. se unan a la gran mayoría del mundo y establezcan el impuesto al consumo que predomina en el planeta.
La propuesta de Cruz es un impuesto de 19% del precio de venta, o sea, 16% del precio total. Si un producto cuesta $84, la propuesta de Cruz sería un impuesto al valor agregado de $16 para un precio final de $100.
La idea de Ted Cruz es eliminar el impuesto sobre ingresos a las corporaciones. Así pues, desaparece la doble tributación donde la corporación paga impuestos sobre ingresos, transfiere dividendos y el accionista paga impuestos por el ingreso por los dividendos. En vez de esto, se le cobra tanto el IVA al consumir como el impuesto al ingreso al recibir el dividendo.
En el mundo de hoy, es difícil para el Gobierno federal cobrar de forma efectiva los impuestos corporativos. Una empresa de alta tecnología de Silicon Valley puede transferir legalmente buena parte de sus ganancias fuera de los EE.UU. De esta forma, evita pagar impuestos al Tesoro federal. Sin embargo, la empresa necesita estar localizada en Silicon Valley para tomar partido del ecosistema de tecnología que existe en esta jurisdicción.
Cruz propone abandonar el juego de gato y ratón que llevan, por un lado, la empresa tratando de evadir impuestos legalmente y por otro, el Gobierno federal tratando de cobrar. En lugar, se cobra a los individuos impuestos por los dividendos que reciben de la corporación e impuesto al valor agregado por todo lo que consumen.
La propuesta de Cruz incluye una tasa de contribución sobre ingresos fija de 10%. Para los segmentos de alto ingreso, esto representaría una reducción significativa en sus contribuciones totales. Además, como los ricos pagarían menos impuestos, el déficit fiscal de los EE.UU. aumentaría.
Como economista, me resulta atractiva la estructura propuesta por Ted Cruz, aunque tengo fuertes reservas en cuanto a las tasas. El déficit fiscal y el gran beneficio a los segmentos pudientes de la población es resultado de la tasa de 10% para individuos. Sin embargo, si en vez del 10% propuesto por Cruz, las tasas fueran, por ejemplo, 10% hasta $200 mil de ingreso, 20% hasta $1 millón y 35% a partir de $1 millón, entonces se obtendrían los beneficios de la estructura propuesta por Cruz sin tener gran impacto sobre los recaudos del Gobierno federal.
Ted Cruz se atrevió a pensar más allá de los esquemas tradicionales. Propuso un cambio radical en la estructura contributiva de los EE.UU. Como tal, le extiendo mis felicitaciones.