Cuba engalana el Día de los trabajadores
Miles acudieron a la conmemoración, mientras el país atraviesa intensas reformas internas
LA HABANA, Cuba.- Cientos de miles de cubanos se lanzaron ayer a las calles para conmemorar el Día Internacional de los Trabajadores, en un momento en que el país atraviesa intensas reformas internas y avanza en su inserción a la economía global.
En un acto presidido por el presidente Raúl Castro, la Plaza de la Revolución de La Habana vio pasar a más de medio millón de almas, entre las que se incluyeron trabajadores de todos los sectores en Cuba, incluyendo representantes del millón de empleados de la recién nacida empresa privada del país, así como delegaciones sindicales y políticas de diversas partes del mundo.
Cuba celebra esta fecha en medio de una importante transformación de su modelo económico que ha trastocado la forma tradicional en que los trabajadores realizaban sus funciones en este país socialista.
Muchos abandonan las filas de las empresas públicas o combinan las labores allí con empleos en los crecientes negocios privados que se abren en el país o en las empresas extranjeras que comienzan a operar en la isla.
Igualmente, ante los bajos salarios en el sector público, la economía informal crece pues cada vez son más los obreros que salen a la búsqueda de ingresos en la llamada moneda dura o peso convertible, conocida aquí como CUC o “fula”, que es el equivalente al dólar o el euro.
Un trabajador cubano se gana en promedio unos $20 al mes, lo cual le es insuficiente para pagar servicios como telefonía celular o productos de importación. Para compensar esa deficiencia, no es anormal ver médicos como meseros o ingenieros como taxistas.
En ese marco, conocido en Cuba como la “pirámide invertida”, debido a que los empleos informales o privados ganan más que los profesionales de alto nivel, los cubanos conmemoraron su día aquí.
El secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), Ulises Guilarte de Nacimiento, dijo que impulsará las reformas económicas que se han comenzado a implantar en el país por el presidente Castro, entre las cuales se dan alta prioridad a liquidar esa “pirámide invertida”.
“Este desfile cada año es un inconfundible respaldo del pueblo a la actualización de modelo económico y social que escogió con soberanía, independencia socialista, próspera y sostenible”, dijo Guilarte de Nacimiento, quien también es miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba (PCC), máximo regente político del país.
El dirigente sindical cubano expresó que la prioridades del movimiento obrero se centrarán en trabajar en los lineamientos que se aprobaron en el reciente congreso del PCC, del cual debe salir el plan de desarrollo económico de Cuba para los próximos 15 años.
“Del análisis que haremos en cada centro laboral saldrá el aporte de los obreros para construir el consenso en torno a ellos y su implementación”, dijo Guilarte de Nacimiento, quien aseguró que “la lucha por la paz, la firmeza ideológica, la eficiencia en la generación de riquezas, la calidad en la producción y los servicios, la integralidad de los encadenamientos productivos, la sustitución de importaciones y la generación de productos exportables”, son otros puntos críticos en la agenda obrera.
La referencia a los Estados Unidos fue inevitable y el énfasis en poner fin al bloqueo o embargo económico, así como la devolución del territorio de la Base Naval de Guantánamo, ocuparon espacio en el discurso.
Fueron cientos de miles de personas las que pasaron por la avenida Paseo, la cual atraviesa la Plaza de la Revolución.
Estribillos como “¡Pa' lo que sea Fi- del, pa’ lo que sea!”, en referencia al líder histórico de la revolución, Fidel Castro, así como los tradicionales “¡el pueblo unido jamás será vencido!”, se escucharon de manera sonora.
“¡Obama (Barack - presidente EE.UU.), te equivocaste con Cuba!”, gritaba insistente un hombre con un cartel que cargaban la imagen del presidente estadounidense, quien visitó la isla en marzo pasado.
“Esperamos que la situación económica mejore para los trabajadores, que todas las reformas que se están manejando den resultados y que podamos aportar a que el país siga mejorando”, dijo a El Nuevo Día la maestra Janet Acosta.
Concluida la celebración, le espera a Cuba un intenso proceso de definición económica que impactará a cada trabajadores del país. ¿Cuán extenso será ese proceso? Eso dependerá de una intensa discusión que recién empieza.