Buena nutrición
=mejor rendimiento académico
El estudiante o universitario de hoy vive de prisa, realiza varias tareas a la vez y el ritmo acelerado de su vida no le permite darle prioridad a alimentarse correctamente. Peor aún, no siempre puede elegir qué y dónde comer, pues, con mucha frecuencia, tiene que conformarse con el lugar que le queda más cerca de sus actividades o, probablemente, come mientras guía, camina o estudia.
Aunque los términos “alimentación” y la “nutrición” se utilizan frecuentemente como sinónimos, es importante aclarar que son diferentes. La nutrición es el proceso biológico mediante el cual los organismos asimilan y utilizan los alimentos para el funcionamiento, el crecimiento y el mantenimiento de las funciones normales. Por su parte, la alimentación comprende un conjunto de actos voluntarios y conscientes que van dirigidos a la elección, la preparación y la ingestión de los alimentos, fenómenos muy relacionados con el medio sociocultural y económico que determinan, al menos en parte, los hábitos dietéticos y estilos de vida.
Una buena nutrición conduce a una serie de beneficios físicos y mentales. Desde la perspectiva de capital humano, estos incluyen mejores estado de salud y bienestar, desarrollo cognoscitivo, y capacidad de estudio y trabajo. Entonces, si la alimentación es muy importante para nuestra vida, ¿por qué no comemos adecuadamente? Hay varias razones como: falta de tiempo, falta de dinero o, en ocasiones, de conocimiento.
LOS BUENOS HÁBITOS ALIMENTARIOS SE APRENDEN
La primera lección es comenzar el día con un buen desayuno. Se recomienda consumir cereales altos en fibra, lácteos bajos en grasa y frutas para mantener un mejor desempeño a lo largo de la mañana. Un desayuno alto en grasa y pocas proteínas y fibra se asocia con mayor sensación de hambre y fatiga a las pocas horas de haberlo consumido, y a poco rendimiento.
La segunda lección es consumir un almuerzo, aunque sea liviano, para ofrecerle al cuerpo las energías necesarias para continuar realizando un desempeño adecuado. El mismo puede estar formado por carnes, vegetales y algún cereal. Se recomienda tener algunas frutas accesibles, ya que pueden ser una muy buena merienda.
Por último, recuerda que en la salud no se improvisa, los buenos hábitos alimentarios se aprenden.
A continuación, algunos alimentos que ayudan a nutrir el cerebro para tener un buen rendimiento:
CEREALES INTEGRALES como pastas, arroz integral, avena, salvado son fuentes de carbohidratos y fibra. Los carbohidratos son la principal fuente de energía que se convierte en glucosa y es el alimento predilecto del cerebro. Su escasez en la dieta puede producir falta de concentración y memoria. Por su parte, la fibra ayuda a que los alimentos se absorban lentamente y a que el cerebro reciba la cantidad adecuada de glucosa. VEGETALES como el brécol, la coliflor, la col y las coles de Bruselas son especialmente saludables, ya que poseen nutrientes que tienen la capacidad de potenciar la memoria y preservar la buena salud del cerebro. Tip: hay que consumirlas “al dente” (pasadas unos pocos minutos por agua hirviendo), ya que pierden sus propiedades. ESPINACAS Y GRANOS: por su alto contenido de ácido fólico son excelentes alimentos para el buen funcionamiento del cerebro. MANZANA Y CEBOLLA ROJA: ambas contiene quercetina y antocianinos, antioxidantes que ayudan a mantener el enfoque y el cerebro en perfectas condiciones.
PESCADO: es uno de los alimentos más importantes para el cerebro. El pescado tiene colina (trabaja al nivel de la memoria) y ácidos grasos omega-3, que ayudan a mejorar el coeficiente intelectual.
NUECES: también tienen un alto contenido de omega-3. Las nueces incluyen toda la variedad como almendras, pistachos y cashews. Además, todas son muy ricas en minerales como hierro (ayudan al cerebro a recibir la correcta cantidad de oxígeno y magnesio). CARNES ROJAS: las carnes en general, pero, sobre todo las rojas y las vísceras, contienen mucho hierro, el cual es indispensable para que el cerebro esté bien oxigenado. (Recuerda consumirlas con moderación.)
HUEVO: además de ser la “mejor proteína del mundo”, contiene colina en la yema, la cual es la base de las células del cerebro.
CACAO: consumido con moderación, puede promover la buena salud del cerebro, ya que contiene antioxidantes que evitan el envejecimiento prematuro del organismo y sus células.
No olvides desafiar a tu cerebro. Puede ser armando un rompecabezas, haciendo malabares, memorizando la letra de una canción, aprendiendo un nuevo idioma o visitando una exhibición de arte. Lo importante es mantener una vida saludable, alimentarse bien y mantener tu mente activa.