El tratamiento quiropráctico y la cirugía espinal
En la mayoría de los casos el paciente llega a nuestra oficina dentro de dos escenarios: ha estado considerando operarse, pero desea intentar el tratamiento Quiropráctico como alternativa para evitar la misma. Y el segundo, se operó y le interesa continuar un proceso de rehabilitación supervisado y coordinado entre su cirujano y nuestro protocolo.
El paciente que está considerando la cirugía espinal por lo general lleva cargando con sus síntomas de forma crónica y afecta su diario vivir. Es importante evaluar a este paciente de forma neurológica, ortopédica y funcional para asegurarnos de que esté estable. Es imprescindible un MRI de la región sintomática reciente y un orden cronológico de los tratamientos que ha recibido dicho paciente. Con estos factores se determina si el tratamiento quiropráctico es para usted. Un referido a su Neurocirujano, puede ser necesario establecer la necesidad clínica y un rango de tiempo para la rehabilitación.
El protocolo para nuestros pacientes consiste en diferentes rutinas de ejercicios, manipulación vertebral, descompresión (flexión/distracción), técnicas de rehabilitación utilizando instrumento para tejidos blandos y estimulación eléctrica para activación de los músculos espinales. A un paciente postquirúrgico se le puede ayudar creando un protocolo específico a sus necesidades con las especificaciones y autorización de su cirujano.