¿Qué quiere el PPD?
¿ Qué quieren los populares? ¿ELA mejorado, ELA desarrollado, ELA soberano, Libre Asociación, República Asociada, ELA agrandado con papitas y refresco?
No sabemos. Lo que sí sabemos es que de la mano de Aníbal Acevedo Vilá, el maestro de los embaucadores políticos por excelencia, la consigna prioritaria va a ser: ofuscar, ofuscar y ofuscar.
Para ello, habrá de fabricar argumentos fatulos basados en premisas distorsionadas. Por ejemplo, al argumento de que la estadidad es una sola, preguntará si la que propone el PNP es con inglés en las cortes y las escuelas o “jíbara” como la predicaba don Luis A. Ferré.
Y eso sin importarle que, como Comisionado Residente que fue, sabe muy bien que por virtud de la Décima Enmienda de la Constitución Federal, el gobierno de Estados Unidos no tiene el poder constitucional de establecer tales condiciones. Eso sería lo mismo que preguntar si la estadidad vendría con Pizza Hut, Burger King o tiendas Best Buy. ¿Qué rayos tiene que ver la estadidad con eso?
En este punto es obvio que la razón por la que Aníbal busca que le den el mando de la Pava es para tener todo el poder de enturbiar las aguas de la razón con falsedades estratégicamente entremezcladas con realidades parciales, de cara a un plebiscito fundamental para nuestro futuro como pueblo. Ese ha sido su modus operandi de toda la vida, y una de las razones por las que hábilmente ha prevalecido, incluso estando enjuiciado en plena corte federal. Pero Puerto Rico se merece algo mejor; alguien que ayude a resolver el problema del estatus, no alguien que ayude a perpetuarlo.
Exijámosle al PPD una sola definición de estatus, no un mejunje de opciones con las cuales diluir en términos porcentuales la decisión final de nuestro pueblo. La hora de “la suprema definición” ha llegado. Carlos R. Urdaneta
Carolina