LeBron vence a Barkley por KO
Aunque el banquete deportivo de este fin de semana es manjar de dioses: Serie del Caribe en México; el regreso al ring del mimado Verdejo, tras fracasar como motociclista; y la edición 51 del Super Bowl, con el quarterback Tom Brady en plano superestelar, no puedo mirar hacia el lado de la guerra verbal de Barkley, quien popularizó la cabeza rapada en la NBA, y Su Majestad LeBron 1, que pasó inventario de la indisciplina y falta de respeto proclive del conceptuado como analista más popular del básquetbol en general en la TV, teniendo como madriguera a TNT, con Ernie Johnson, Kenny Smith, el más objetivo, y Shaquille O’Neal, comparsa para bromas, el ingrediente permeable de principio a fin.
Hace unos días, Sir Charles, que jugó 16 temporadas con Filadelfia, Phoenix y Houston, sin ganar un título, llamó ‘llorón’ a Lebron por pedir públicamente que la gerencia de Cleveland debía agregar un defensa o alero de impacto que ayude a revalidar el cetro ganado a Golden State luego de un 1-3 que parecía ir camino de la tumba.
No fue la primera vez que Barkley se ensaña con el comportamiento de LeBron, no con su calidad, pues le reconoce ser el mejor del mundo; pero este se hastió de sus insultos y le pregonó un listado de sus pecados, que va desde escupir a una niña en un partido hasta su apego infestado de alcohol, con peleas de por medio, y los juegos de azar, particularmente en los casinos de Las Vegas, dejando deudas alarmantes.
Aunque James lo llevó al plano personal, tiene razón de sobra en darle un tapón bucal a quien se siente omnipotente por tener mucho respaldo del fanático por comentar descabelladamente, moviendo su lengua como si fuese un destaponador de inodoros, además de vanagloriarse de ser Fiscal del Pueblo, sin darse cuenta que no puede escupir hacia arriba porque la saliva le empapa su calva.
En el asunto de marras, Isiah Thomas, para mi el rey de los análisis baloncestistas, sentenció que LeBron poseía la razón al exigir respaldo porque es obvio que los Cavaliers no pueden quedarse sólo con Korver por el lesionado J. R. Smith; mientras los Warriors agregaron a Kevin Durant y los centros Zaza Pachulia y JaVe McGee por la ida del sempiterno lastimado, Andrew Bogut a Dallas.
En fin, a Barkley le acaban de dar una patada en su trasero abultado y parece que no le dolió lo suficiente...