Celebran Primer Simposio de Psicología Escolar y Consejería Profesional
Estrategias para el manejo de alumnos con ideas suicidas, bullying y talleres sobre cómo puede aportar un psicólogo en el entorno escolar, fueron algunos de los temas que se discutieron a profundidad en el Primer Simposio de Psicología Escolar y Consejería Profesional: Una mirada integral al estudiante del siglo 21.
El evento, que se llevó a cabo en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico (PUCPR) recinto de Ponce, contó con la participación de destacados expertos en psicología, académicos, abogados y educadores.
“Aunque se habla mucho, todavía sigue siendo un grave problema en el entorno escolar todo lo que es el bullying, y las tendencias suicidas entre los jóvenes, por eso estos temas son una prioridad”, dijo la portavoz principal de este simposio, la doctora Patricia L. Landers Santiago, catedrática auxiliar del Programa de Psicología Escolar de la Escuela Graduada en Educación de la PUCPR.
Este primer simposio nació tras la inquietud de un grupo de estudiantes de los programas de Consejería Profesional y Psicología Escolar de ofrecer un espacio para la discusión y el crecimiento profesional de psicólogos, consejeros, maestros y demás profesionales asociados con la educación del país.
Los temas que se discutieron son apremiantes en la actualidad. El tema general y el contenido del mismo surgió de la información recopilada a través de los estudios de necesidades realizados por estudiantes de internado de Psicología Escolar en sus respectivos centros. También participaron estudiantes del programa de Consejería Profesional de la Escuela Graduada de Educación de la PUCPR, sobre lo que se vive diariamente en las escuelas y los principales retos que enfrentan los maestros y los consejeros escolares.
“Uno de los elementos más importantes de este simposio fue que resultó como una iniciativa de nuestros estudiantes, jóvenes comprometidos que desean aportar a la educación y a la salud mental del país. Uno de los requisitos del internado es administrar un estudio de necesidades a padres y maestros en las distintas escuelas que sirvan como centros de internado. De esta manera, les fue posible descubrir, de primera mano, los retos de los miembros de la comunidad escolar”, indicó la doctora Landers.