Hacienda en silencio
En esta vorágine económica que vivimos, donde lo más que escuchamos es la reducción de las pensiones y de las aportaciones a los que dan servicio, como las entidades sin fines de lucro y nuestra Universidad, encuentro como gran ausente los esfuerzos de recaudos por parte de Hacienda.
En mi época de empleo con el Internal Revenue Service, ejecutábamos sondeos estratégicos en áreas geográficas o actividades específicas para determinar cumplimiento con los cánones legales vigentes. Invitábamos a Hacienda a participar en conjunto. En una visita, un agente podía verificar radicación de planillas, pagos de impuestos y vigencia de licencias y patentes.
En los 20 años que tuve un negocio en un área metropolitana rica en actividad comercial, jamás recibí la visita de un Agente de Rentas Internas verificando mi cumplimiento. Asumo que esta sea la realidad de cientos de negocios en Puerto Rico.
Como es la realidad de miles de ciudadanos que reciben desempleo, ayudas federales, pero a su vez mantienen un negocio que opera fuera de la mirilla de Hacienda.
Es muy fácil aumentarle tributos al que ya paga, lo grande está en dar con los evasores. Invito a nuestro secretario de Hacienda a formalizar sondeos de las marinas, de los centros comerciales y de las áreas de intensidad comercial. A auditar a los dueños de negocio propio y profesionales que ocultan ingresos. Insto al CRIM a tasar y cobrar a los que no pagan contribuciones antes de retasar a los que ya lo hacen. Se sorprenderán de los resultados.
Ya es hora de partir la soga por lo más grueso.
Sonia S. Peña San Juan