Yadier Molina disfruta cada clásico estelar
El receptor puertorriqueño de los Cardenales de San Luis está en el octavo Juego de Estrellas de su gloriosa carrera
MIAMI, Florida.- Yadier Molina ya es un veterano de los Juegos de Estrellas, pero el receptor de los Cardenales de San Luis asegura que todavía siente la misma emoción como si fuera la primera vez.
Molina, quien será suplente del titular de la Liga Nacional, Buster Posey, vuelve al escenario estelar luego de ver su racha de siete participaciones consecutivos llegar a su fin el año pasado.
“Me siento feliz de poder participar en otro Juego de Estrellas y es un motivo de gran orgullo el poder representar a mi Isla y los Cardenales de San Luis. Cada vez que tu pasas tiempo con estos compañeros de juego, es una gran experiencia”, dijo el puertorriqueño durante el ‘media day’ ayer en el Marlins Park.
“Uno siempre aprende de los otros compañeros que sólo te acostumbras a ver (como rival) en el terreno de juego. Compartes con ellos en el dugout y de verdad es una experiencia única”, agregó.
Luego de su ausencia del pasado año, Molina fue escogido por sus compañeros de la liga como reserva en momentos que atraviesa por una sólida actuación con los Cardenales. El receptor encabeza la liga en partidos jugados (74) y en entradas jugadas (649), y a la ofensiva está entre los mejores cuatro de su posición en hits (76), promedio de bateo (.270), jonrones (nueve) y carreras empujadas (40).
Con un nuevo contrato firmado por tres años y $60 millones, Molina aseguró que todavía le queda tiempo por jugar detrás del plato y que no tiene contemplado un cambio de posición.
“Cuando pasan los años las cosas se hacen más fuertes en cuanto a la posición mía y catchear todos los días. Es un poco difícil, pero a la misma vez uno se prepara para ello. Uno trabaja fuerte para que lleguen momentos como éste y gracias a Dios estoy en un Juego de Estrellas más”, explicó Molina al descartar cualquier posibilidad de trasladarse de posición.
“No pienso hacerlo. De verdad, si trato de moverme, mejor me retiro”, dijo. “Yo no soy un primera base, soy un catcher natural y el día que no pueda jugar, me quito, pero todavía hay para rato”.
Molina, por su parte, se mostró contento de que en su octava participación en el clásico de media temporada comparte el escenario junto a sus compatriotas Carlos Correa, de los Astros, y Francisco Lindor, de los Indios.
“Es una emoción bien grande. Cada vez que compartes en el terreno con otro puertorriqueño es una felicidad porque estamos representando a nuestra Isla. Estoy bien contento y espero que el año que viene no sean sólo tres, pero cuatro o cinco o más”, agregó.
“Ambos tienen un gran talento. Sé que les gusta trabajar bien fuerte y hacer las cosas bien, y si siguen así van a tener un gran futuro”.
En cuanto a los Cardenales, que se encuentran empatados en el segundo puesto en la División Central junto a los Cachorros a cinco juegos y medio de los líderes Cerveceros, Molina consideró que todavía hay tiempo para remontar la diferencia.
“Todavía estamos ahí. Obviamente no estamos en la posición que quisiéramos ya que hemos tenido nuestras altas y bajas, pero en el béisbol no hay nada escrito. Ahora en las últimas dos semanas hemos jugado una pelota más consistente y esperamos que podamos seguir así”, concluyó.