AES avalaría estudio epidemiológico
Respalda avalúo epidemiológico del Departamento de Salud en la zona
La empresa Applied Energy System (AES Puerto Rico) recalcó ayer su apertura a que el Departamento de Salud realice un estudio epidemiológico para evaluar si la actividad de la cogeneradora ha incidido de forma alguna en la salud de los residentes de las comunidades aledañas.
“En la vista del Proyecto del Senado 81, yo le propuse al senador (independiente José) Vargas Vidot que hiciera ese estudio”, aseguró el presidente de AES, Manuel Mata, en entrevista con El Nuevo Día.
De hecho, el representante independentista, Denis Márquez, radicó ayer una resolución para ordenar al Departamento de Salud y a la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Puerto Rico que realicen un avalúo de las condiciones de salud de los residentes de Guayama, sobre todo, de comunidades próximas a AES.
Vecinos del barrio Puente Jobos en Guayama denunciaron, en entrevistas con este medio, que padecen de alergias, asma, problemas en la piel y cáncer y que ellos consideran que esas condiciones están vinculadas a las cenizas que produce la quema de carbón en la planta de AES.
Pero Mata reiteró que las cenizas no son tóxicas, que su planta no emite polvos fugitivos y que cuenta con todos los mecanismos de seguridad para que las comunidades aledañas no afecten.
“Yo creo que hay una falta de información en la comunidad. Hay personas que crean esa zozobra”
¿Habrá algún acercamiento para dialogar con quienes aseguran que sus padecimientos se deben a la actividad de AES?
—El acercamiento lo va a haber. De hecho, hemos identificado dónde viven... Estas personas que tienen este problema no se han acercado a la planta. La casa (de uno de los vecinos que se quejó) está lejos, y esa persona tiene vecinos que trabajan en la planta y tiene vecinos que dicen que no hay polvo fugitivo. Ellos mostraron un polvo negro acumulado en los muebles.
—Cuando la Junta de Calidad Ambiental (JCA), la EPA (Agencia de Protección Ambiental) y AES dicen que dentro de la planta no hay polvo fugitivo, y unas personas a dos millas de distancia dicen que ellos tienen polvo, yo lo que les diría a ellos es que investiguen qué polvo es. ¿Será el CO2 (dióxido de carbono) de los carros que circulan al lado? ¿Serán las carreteras que no están asfaltadas y levantan tierra?
Según Mata, las tres posibles fuentes de temor para los ciudadanos -las emisiones, las escorrentías y el polvo fugitivo- están atendidas. “Típicamente, de lo que la gente se queja de las plantas es de la emisiones que salen por la chimenea... La nuestra es una planta modelo que tiene las emisiones más bajas de Estados Unidos”, aseguró el ingeniero, quien indicó que el recelo de los vecinos puede deberse a la desinformación.
Mata agregó que la planta cumple con los estándares de emisión de mercurio y contaminantes tóxicos (MATS, en inglés) que requiere la EPA. “AES cumple con el límite de emisiones MATS desde el día uno; no hay forma de que las emisiones atmosféricas afecten a las personas que están allá”, dijo.
Sobre las escorrentías, el ingeniero explicó que la suya es una planta que no descarga líquido. “En Puerto Rico, no hay una planta así, y en Estados Unidos, puede que solo sea el 3%. Todo el agua que se usa se recoge y se reusa”, aseguró Mata. “Físicamente, el agua no puede salir de la planta”.
El tercer renglón, -que provoca la mayor parte de la controversia- tiene que ver con los polvos fugitivos. “La Junta de Calidad Ambiental ha hecho cuatro evaluaciones de polvos fugitivos en lo que va de año, y en esas cuatro (visitas sorpresa), han detectado que la emisión de polvo fugitivo es cero”, insistió. Pero el presidente del Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico, Víctor Ramos, afirmó que el efecto adverso de las cenizas “está demostrado”.
—Los análisis que se le han hecho a las cenizas demuestran que el contenido de los metales está muy por debajo de los máximos permitidos. No hay ningún tipo de riesgo. Cuando tú comparas la ceniza con la tierra, tienen las mismas concentraciones de esos materiales. ¿Afirma que las cenizas nunca son tóxicas? —Nunca. ¿El presidente del Colegio de Médicos Cirujanos miente?
—Las cenizas no son tóxicas aquí, ni en Japón, ni en Alemania, ni en España, porque las plantas de carbón aquí están en todas partes del mundo, y, en ninguna parte del mundo, las cenizas son tóxicas. Y el señor (Ramos), si tú me preguntas, sí está diciendo mentiras.
Los ejecutivos de AES mostraron a este medio los resultados del Toxicity Characteristic Leaching Procedure (TCPL), método requerido por la EPA para verificar los trazos de metales en los residuos de combustión del carbón. En todos los componentes -arsénico, boro, cadmio, cromo, plomo, mercurio, selenio y plata-, el Agremax está por debajo de los límites.
“Cada vez que voy a un congreso con mis colegas de otras plantas, yo soy el ridículo. Se burlan de mí. El único país del mundo donde las cenizas son tóxicas es en Puerto Rico. Realmente es frustrante”, dijo.
Sin embargo, líderes comunitarios desconfían de los límites que establece la propia agencia ambiental. De hecho, el portavoz del Comité de Diálogo Ambiental de Salinas, Víctor Alvarado Guzmán, trajo ayer a colación, nuevamente, una carta enviada en 2012 por el entonces jefe de Subidivisión de Cumplimiento del Resource Conservation and Recovery Act de la región 2 de la EPA, George C. Meyer, en la que, supuestamente, pone en duda la efectividad de este método analítico de lixiviación. Ramos afirmó que las agencias deciden “usar métodos para probar toxicidad que solo favorecen a las empresas”.
—Él está diciendo que la EPA, a nivel mundial, utiliza una prueba para ver si la ceniza es tóxica, que no es la adecuada. Tendrá que decirle a la EPA.
MANUEL MATA PRESIDENTE DE AES