Alimentan cuerpo y alma
El activismo puede iniciar alrededor de la mesa. A veces, está en el plato.
Inspirados por celebridades y una nueva generación de chefs, los veganos de raza negra están saliendo a promover su causa.
“Cocino como una abuelita”, comentó Bryant Terry, el chef residente en el Museo de la Diáspora Africana, en San Francisco, a The New York Times. “Lo que realmente me emociona son algunos de los chefs más jóvenes que tienen preparación profesional y saben armar platillos de una manera nueva”.
Sin embargo, el esfuerzo va más allá del sabor, la salud o el bienestar animal. Para muchos veganos de color, es una decisión política.
“Cuando dices ‘vegano’, mucha gente tiende a sólo pensar en (la organización de defensa animal) PETA, lo que no refleja el panorama masivo del activismo vegano”, dijo Aph Ko, quien inició un sitio en internet de veganos de raza negra famosos, en el 2015. “El movimiento vegano de color es uno de los movimientos más diversos, no coloniales, complejos y creativos”.
Tassili Ma’at, propietaria de Tassili’s Raw Reality, un restaurante vegano en Atlanta, explicó que la decisión de no comer carne es tanto sana como subversiva.
“Reconozco a mis clientes por ser revolucionarios de la era moderna sin blandir un arma, tener que lanzar una granada o levantar una pancarta de protesta”, declaró a The Times.
Y aunque algunos veganos de raza negra creen que la alimentación sana es una decisión radical, un grupo de mujeres está usando el queso para promover su propia agenda. Nada de quesos brie y stilton. En su lugar están Womanchego, Mrs. Robinson, Woman of La Mancha y quesos bautizados en honor a Misty Copeland, Marie Curie y Amelia Earhart.
La elaboración de quesos en EE.UU. ha tomado un giro feminista, indicó Alexandra Jacobs, de The Times, y “figura como un ejemplo obvio, aunque subestimado, del lugar de trabajo matriarcal por excelencia”.
Y es un movimiento creciente. Hay más de 900 productores de quesos de especialidad en el país, de acuerdo con la Sociedad de Quesos de EE.UU.
“Todas somos mujeres aquí”, dijo Rhonda Gothberg, dueña de Gothberg Farms, que produce Woman of La Mancha. “No es requisito que sean mujeres, simplemente resultó de esa manera. Hemos intentado con un par de varones, y no eran lo suficientemente pacientes, amables ni limpios”.
A veces, las catástrofes incitan al activismo. José Andrés, un chef español ganador de estrellas Michelin, se sintió obligado a ayudar luego que el huracán María azotó Puerto Rico a fines de septiembre.
Con el apoyo de World Central Kitchen, un grupo sin fines de lucro que él fundó en el 2011, Andrés viajó a Puerto Rico y estableció una red de cocinas y proveedores que, un mes después, ha servido 2 millones de comidas, más que cualquier otro grupo sin fines de lucro o dependencia gubernamental. Para fines de noviembre, esa cifra era de 3 millones.
No se dio cuenta de que era el proveedor más importante de comida caliente en la isla hasta que llegó alguien del Ejército de Salvación pidiendo 120 comidas.
“Al final, no podía perdonarme a mí mismo si no trataba de hacer lo que creía que era lo correcto”, aseveró. “A veces, necesitamos pensar y soñar menos, y simplemente hacer que suceda”.