Decisiones basadas en datos = mejor Puerto Rico
Cuando se trata del bienestar social, tradicionalmente se consultan expertos para tomar decisiones según su opinión. Desde el 1984 hasta el 2003, el académico Phillip Tetlock obtuvo predicciones de eventos geopolíticos y económicos de sobre 280 expertos, según la opinión de estos. Por ejemplo, se les preguntó a algunos peritos en la materia si la Unión Soviética se disolvería antes del 1993; o de la dirección del mercado de valores en los próximos años. El investigador encontró que, en general, los expertos tuvieron un desempeño equivalente a adivinar el resultado. En adición, métodos estadísticos sencillos consistentemente mostraron un mejor desempeño que los expertos.
El hecho que decisiones objetivas tienden a ser más efectivas que decisiones subjetivas ha sido confirmado por múltiples investigaciones; y es una de las razones por las que entidades privadas, gubernamentales y sin fines de lucro usan métodos como ciencia de datos y ‘Big Data’.
El paradigma de tomar decisiones basados en datos empíricos, sin embargo, nunca ha tenido buena acogida en Puerto Rico. Y ahora, cuando atravesamos una recesión por más de una década y lidiamos con unos de los peores huracanes en nuestra historia, todo indica que los políticos en poder están lejos de apreciar el uso de estadísticas.
Por un lado, el gobernador y varios de sus aliados persisten en desmantelar el Instituto de Estadísticas de Puerto Rico (IEPR) aferrados a la premisa que la medida ahorrará dinero a través de contrataciones externas para procesos estadísticos. No existe evidencia alguna de que la medida ahorrará dinero e inclusive, el contrato por $1.3 millones para revisar las muertes debido al huracán María – cantidad de dinero cerca del presupuesto anual del IEPR – indica lo contrario. Por otro lado, legisladores de la minoría – los populares tampoco tienen un buen récord en el uso de datos estadísticos – apenas han defendido la independencia del IEPR.
Desde finales del año pasado, un grupo de científicos hemos trabajado para que no se desmantele el Instituto de Estadísticas. Liderado por la Asociación Americana de Estadística (ASA por sus siglas en inglés), se creó una petición. El ASA cuenta con unos 19,000 miembros. La presidenta, Lisa Lavange, escribió una carta al gobernador en la que sugirió que se adoptarán métodos de toma decisiones basados en datos y ofreció su asistencia para atender la crisis. La carta nunca obtuvo respuesta del gobernador.
Varias medidas tomadas por el gobernadorpara eliminar o alterar la estructura del IEPR han fracasado. Y la Junta de Control Fiscal no certificó el plan fiscal del gobierno; en parte porque la Junta sostiene que el Instituto de Estadística debe permanecer como entidad independiente. Sin embargo, mantener el IEPR abierto e inalterado nunca ha sido la intención principal del grupo liderado por ASA. En vez, pretendemos convencer a los servidores públicos del papel crucial que juegan las estadísticas en la toma de decisiones. De poco sirve mantener el IEPR abierto si no se usa apropiadamente. Por décadas, Puerto Rico ha sido gobernado sin recurrir al uso datos en la toma de decisiones. Es tiempo de reconocer que dicha política no es sustentable en el siglo XXI.