Llamado a reforzar la vacunación masiva
Los planes de vacunación son efectivos al punto de erradicar algunas enfermedades que fueron potencialmente mortales
Vacunarse, según las recomendaciones establecidas, reduce las posibilidades de enfermar, la morbilidad, la mortalidad, las hospitalizaciones y la transmisión de enfermedades que se ha probado científicamente son prevenibles mediante la inmunización.
La vacunación es un factor muy importante para controlar el bienestar humano. La única forma de no enfermar es viviendo en un país exento de enfermedades, no salir de la casa y no viajar, y eso es casi imposible. Vivimos en un mundo movible, así que nos podemos infectar en cualquier lugar de una enfermedad que cause discapacidades o hasta la muerte. La mejor forma de prevenir es estando todos vacunados y no una facción de la población.
ITINERARIO SALUDABLE EN DIFERENTES ETAPAS
La inmunización para un bebé indirectamente comienza desde el vientre de su madre y la lactancia. Mediante la lactancia las madres que han sido vacunadas protegen a sus hijos hasta que estos comiencen a recibir sus vacunas completas a los dos meses de vida.
Cuando llega la adolescencia, tenemos los refuerzos de los 11 años, meningitis, Tdap, VPH (prevenir cáncer) y la influenza. De igual modo, las vacunas son importantes en las diferentes etapas de la vida, incluso en la vejez. Las personas mayores de 65 años tienen sobre cinco enfermedades crónicas en su vida, por lo tanto, la vacunación les disminuye las complicaciones que pueden presentarse sin la debida inmunización, específicamente, aquellos con diabetes, con enfermedades cardiovasculares y pulmonares, cáncer y los asmáticos. Para estos es imprescindible la vacuna contra la pulmonía cada diez años y la de influenza anualmente.
Otro sector que debe tener como prioridad vacunarse son las mujeres embarazadas. Si no se vacunan, las complicaciones que pudieran presentar sí podrían poner en riesgo al bebé; mientras que inmunizadas los protegen. Toda persona inmunocomprometida, también deben vacunarse.
EFECTIVIDAD PROBADA
Los planes de vacunación son efectivos al llevar a la erradicación de algunas enfermedades que en el pasado fueron potencialmente mortales. Afortunadamente, en las Américas hemos logrado erradicar algunas de esas enfermedades que conocieron y padecieron nuestros abuelos. Una de ellas es la viruela, el polio, el sarampión y la rubéola. La mayoría de ellas están controladas por la inmunidad grupal que se logra teniendo el 80 % o 90 % de la población vacunada.
La vacunación masiva ha aportado para lograrlo, pero hay factores importantes para velar que continúe este esfuerzo. Es preocupante que de acuerdo con el último censo, solo el 6 % de los pediatras vacunan en sus oficinas y es el médico primario de los bebés. Es necesario un registro de vacunación que permita conocer las cifras exactas de quienes han cumplido con su itinerario de inmunización. La autora es excirujana general de los Estados Unidos.