Berríos es el dueño y señor del Target Field
Desde el 2017, el boricua tiene marca de 11-3 en el estadio de los Mellizos con efectividad de 2.59
José Berríos tiene una gran afinidad con el Target Field, hogar de sus Mellizos de Minnesota. Y sus números en dicha instalación así lo confirman.
El lanzador puertorriqueño volvió a crecerse en casa el lunes en la noche. Y sus victorias allí se han convertido en algo rutinario en especial desde el año pasado.
Berríos, quien el lunes se alzó con la victoria al permitir apenas dos carreras y ponchar a nueve bateadores de los Tigres de Detroit en ocho entradas de trabajo, lleva once triunfos frente a tres derrotas en el Target Field en las últimas dos temporadas con una efectividad de 2.59.
El boricua logró marca de 9-1 en el 2017 con una tacaña efectividad de 2.41. Sus contrarios apenas le promediaron .199.
En lo que va de la actual campaña, el tirador de 23 años tiene expediente de 3-2 con efectividad de 3.60 y sus rivales le han bateando para .178.
El lunes se repuso de un tambaleante comienzo cuando permitió un jonrón en la misma primera entrada (Nick Castellano) y cedió otra en la tercera con un sencillo impulsador del propio Castellano.
Pero de ahí adelante enderezó y continuó con su habitual dominio sobre los bateadores contrarios en la casa.
“Al principio del juego sentí que ellos sabían lo que iba a tirar”, dijo Berríos a The Associated Press. “Así que regresé al dugout y salí con otro plan de trabajo”.
Berríos (5-4) retiró 16 de los últimos 17 bateadores y cedió el montículo al taponero Fernando Rodney. En la octava, los Mellizos marcaron en par de ocasiones para tomar el comando y fue su compatriota Eddie Rosario uno de los principales protagonistas al pegar un doble y en un agresivo y arriesgado corrido de base marcó la cuarta vuelta de los locales.
ESTILO PUERTORRIQUEÑO
A Berríos no le sorprendió el agresivo juego de su compañero.
“Eso fue a nuestro estilo de juego puertorriqueño. Esa es la forma que él juega”, señaló Berríos al
Star Tribune sobre el corrido de base de su compatriota
Rosario aprovechó un parpadeo del jardinero central Leonys Martin y se lanzó al plato en un batazo corto por ese predio.