Naturaleza que calma
E l descenso sonoro de una fina cascada, el murmullo del arroyo mientras recorre las piedras a su paso, el rumor que provoca el viento en la hierba mojada... ¿Cómo te sientes? ¡Sí! Esa rica calma que te seduce —como un aliciente liberador— proviene de la Madre Naturaleza. ¿La razón? Los investigadores de la Escuela de Medicina de Brighton y Sussex (BSMS), de Reino Unido, encontraron que escuchar sonidos de la naturaleza afecta a los sistemas corporales que controlan los sistemas nerviosos autónomos de vuelo-o-pánico y de descanso-digestión, con efectos asociados en la actividad de reposo del cerebro. El estudio publicado en Scientific Reports revela que al escuchar los sonidos naturales, la conectividad del cerebro reflejaba un foco de atención dirigido hacia el exterior y al escuchar sonidos artificiales, la conectividad cerebral reflejaba un foco de atención dirigido hacia dentro, similar a los estados observados en la ansiedad, el trastorno de estrés postraumático y la depresión.
Lección: ¡Reconéctate con lo natural!