Sin los votos para derogar la Ley 80
Gobernador insiste en que enmienda de la Cámara fue idea de Thomas Rivera Schatz
La propuesta cameral que deroga la Ley contra el Despido Injustificado (Ley 80-1976) y crea un fondo de $100 millones para compensar a trabajadores despedidos de la empresa privada aún no cuenta con los 16 votos necesarios para ser aprobada en el Senado.
Aunque el presidente de la Cámara alta, Thomas Rivera Schatz, citó un caucus hoy a las 2:00 p.m, hasta ayer solo los senadores Abel Nazario y Margarita Nolasco favorecían las enmiendas sometidas por la Cámara de Representantes al proyecto del Senado 1011.
“Margarita y yo seríamos dos votos versus los demás compañeros, así que iría a comité de conferencia”, indicó Nazario sobre uno de los posibles escenarios a verse hoy en el Senado.
Nazario sostuvo su determinación de favorecer la eliminación del estatuto a pesar de que señaló que la exigencia puede responder a un presunto “chantaje” de la Junta de Supervisión Fiscal (JSF).
“Yo voto a favor de esto simplemente porque estoy entre la espada y la pared. Si voto en contra van a dejar a los empleados públicos sin su bono de Navidad, sin sus días de vacaciones y enfermedad...”, señaló.
“Puede ser un chantaje de la Junta, pero es la realidad. Si somos colonia, es lo que tenemos”, subrayó el senador.
Al ser cuestionado ayer sobre cómo explicar que el gobierno pagará -mediante un fondo- las mesadas de despidos injustificados en la empresa privada, el gobernador Ricardo Rosselló reafirmó sus expresiones del viernes en las que indicó que la “propuesta” incluida por la Cámara fue de la autoría de Rivera Schatz.
“Esto fue una propuesta que estableció el presidente del Senado en discusión con los miembros de la Junta de Supervisión Fiscal. Hubo un diálogo, me recuerdo que fue a principios de junio. Yo tuve diálogo con él. Él tuvo diálogo con ciertos miembros de la Junta”, respondió el primer ejecutivo a El Nuevo Día.
El gobierno negoció $345 millones en el presupuesto a cambio derogar la Ley 80, pero ese dinero está destinado en el presupuesto del próximo año fiscal a la creación de un fondo municipal y otro para la Universidad de Puerto Rico.
De inmediato, el presidente senatorial volvió a rechazar las expresiones de su líder político. “El gobernador está equivocado... Si él lo quiere personalizar, es un asunto de él. (La propuesta) no es mía y no la voy a respaldar”, sentenció Rivera Schatz.
“Si él no quiere rectificar y no quiere entenderlo, y quiere creer que es una propuesta mía, pues que espere a que se atienda en el Senado el asunto y ya veremos de lo que se trata”, agregó.
El Senado tiene ante sí tres posibles escenarios: concurrir con las enmiendas sometidas por la Cámara, enviar la medida a comité de conferencia para dirimir esas diferencias o no concurrir, que equivaldría a no aprobarlo.
Rivera Schatz sostuvo que el proyecto es inconstitucional al destinar dinero del erario para el pago de mesadas del sector privado.
“Yo he estado diciendo eso. Yo he estado diciendo que esa propuesta adolece de graves deficiencias jurídicas”, afirmó.