¿Quién vacuna?
Fue una incómoda sorpresa escuchar a un médico decir que se opone a que los niños sean vacunados por los farmacéuticos porque “la farmacia es un negocio”. Podrán existir razones fundadas en estudios, opiniones diferentes y consideraciones personales que puedan exponerse con razonabilidad en un debate relacionado con el tema de quién debe vacunar, pero esta expresión no tiene espacio en esta discusión.
Esas cinco palabras fueron inoportunas en este tiempo en que los profesionales de la salud deben estar más conectados que nunca para que los pacientes estén bien atendidos; cuando hay esfuerzos para que haya equipos multidisciplinarios; y se han hecho prácticas y estudios que han determinado la ayuda que brindan las alianzas. Necesitamos discusiones y diálogos cordiales, no afirmaciones provocadoras.
Es cierto que las farmacias operan como un negocio, igualmente lo hacen las oficinas médicas; es sensato que procuren buena salud financiera para poder ofrecer el servicio. Todos los lugares que ofrecen servicios de salud operan como negocios - hospitales, laboratorios, centros radiológicos, etc., pero todos los que allí trabajan son profesionales de la salud con la misión y compromiso de prevenir, diagnosticar, aliviar y curar enfermedades. El quehacer de cada uno de ellos debe ser apreciado para que juntos cumplan con el compromiso contraído con las personas y con el país.
Puerto Rico necesita más profesionales de la salud que atiendan a un pueblo con limitaciones económicas, que envejece y está extenuado. Deberíamos estar en alianzas, en actitud de cooperación y colaboración, discutiendo cabalmente los pros y contras de decisiones que puedan beneficiar a las personas. La academia está entrenando a los futuros profesionales de la salud para que compartan responsabilidades y juntos procuren el bienestar de los pacientes. La nueva generación de médicos, farmacéuticos, enfermeras, entre otros, buscará ese ambiente de compañerismo para el que fueron adiestrados. Se dice que los profesionales de la salud están saliendo de Puerto Rico. No los estimularemos a permanecer en el país con actitudes de desafío y promoviendo el aislamiento de profesiones. Se están adiestrando para otro estilo de práctica, no para mantener estilos desusados.
Hay variedad de opiniones y cada una de ellas debe escucharse, considerarse y tomarse en cuenta, sobre todo cuando se trata de salud. Segmentación no es lo que necesitamos en Puerto Rico.