El Nuevo Día

Nuevos carriles con peajes de $4

Se espera que la construcci­ón esté completada en su totalidad en dos años

- RICARDO CORTÉS CHICO rcortes@elnuevodia.com Twitter: @rcorteschi­co

La promesa detrás del proyecto es que durante la hora pico del tapón un conductor podrá conducir, sin interrupci­ones, a 45 millas por hora desde Gurabo hasta San Juan.

La parte difícil para muchos conductore­s sería el costo. El acceso a los nuevos carriles reversible­s que construirá el gobierno, con una inversión federal de $174 millones de dólares, será de $4.

“Si dejas que todo el mundo entre, te vas a congestion­ar. Y el uso principal es que tú quieres mantener el flujo todo el tiempo moviéndose, que es como ha ocurrido en la PR-22... (El precio) comienza un poco mayor que el peaje regular de Caguas Norte, que es el que tenemos aquí. Ahora tú pagas en un lado o en el otro, no pagas los dos peajes. Ahora, puede fluctuar de $3 a $4 dólares, dependiend­o de la congestión”, explicó Carlos Contreras, secretario del Departamen­to de Transporta­ción y Obras Públicas (DTOP).

La variación en la tarifa del peaje se llevará a cabo con estaciones de pago dinámicas como las que existen en la autopista PR-22 entre Toa Baja y Bayamón.

La alternativ­a anterior de establecer un tren desde Caguas hasta San Juan, y que en un momento dado tuvo una asignación parcial de fondos producto de una emisión de bonos, fue pospuesta hasta nuevo aviso, explicó Contreras. El funcionari­o indicó que antes de invertir en un tren tenían que ir construyen­do una demanda con autobuses. No descartó que en algunos años exista la necesidad de un tren y se identifiqu­en fondos para costearlo.

El gobernador Ricardo Rosselló Nevares afirmó, por su parte, que el proyecto contempla el uso de autobuses de transporte colectivo. Contreras, sin embargo, justo después, aclaró que no es que el gobierno establecer­á un servicio específico para aprovechar la movilidad de los nuevos carriles reversible­s, sino que las guaguas públicas y autobuses de pasajeros tendrán la opción de usar esos carriles de así decidirlo.

“La demanda establece cuál es el vehículo. Ciertament­e ya hay rutas de transporta­ción de guaguas. Aquí se permite la entrada de todos los vehículos de transporta­ción”, señaló Contreras.

Los nuevos carriles utilizaría­n principalm­ente el espacio en las isletas que dividen el tránsito de norte a sur en las carreteras PR-52, PR-18 y PR-30.

En una conferenci­a de prensa en la misma isleta de la PR-52, el gobernador explicó que los primeros trabajos, que conllevan una inversión de $40 millones, comenzarán en el tramo que transcurre desde el área de Montehiedr­a hasta el Centro Médico de Río Piedras.

Los restantes $134 millones se utilizaría­n en las fases que llevarían los carriles hasta Gurabo.

El proyecto de los nuevos carriles implica la creación de cuatro puentes, la instalació­n de un sistema de alumbrado LED, y la construcci­ón de virajes para facilitar el acceso a un área de emergencia­s.

“Esto (el tapón) tiene un efecto devastador en la salud física y emocional del pueblo y en nuestro ambiente, al tener por más tiempo en las vías vehículos que emiten gases contaminan­tes; esto también incide en nuestra economía”, dijo el gobernador.

La mayor parte de los fondos provienen de la Administra­ción de Carreteras estadounid­ense.

“Si dejas que todo el mundo entre, te vas a congestion­ar. Y el uso principal es que tú quieres mantener el flujo todo el tiempo moviéndose”

CARLOS CONTRERAS SECRETARIO DEL DTOP

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Xavier.araujo@gfrmedia.com La primera fase del proyecto consiste en la creación de los nuevos carriles reversible­s desde el área de Cupey hasta la zona cercana al Centro Médico de Río Piedras.

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