Báez, Lindor y Rosario de cara al arbitraje
No hace falta repetir las campañas excelentes que ha tenido el trío de Javier Báez, Francisco Lindor y Eddie Rosario con los Cachorros, los Indios y los Mellizos respectivamente, lo que, sin dudas, empuja a que sus agentes podrán presentar estadísticas favorables de cara a su primer año de elegibilidad en 2019 para arbitraje, y que de seguro saldrá triunfante.
Un cuarto, Carlos Correa, también califica para este sistema que empezó en 1974, pero luce que su representante, Greg Genske, sería más cuidadoso porque tuvo un desempeño tibio por sus lesiones en la espalda que le mantuvo fuera durante 52 partidos.
De hecho, los cuatro se convertirán en agentes libres en 2022, aunque Correa ya cobró un millón en 2018, y sus compatriotas poco más de $600 mil, además de una bonificación de $,4,800,000 al ser el primero del draft en 2012 y otro convenio millonario con la firma comercial Adidas, en 2016.
Asimismo, ha sido tan notable la labor de Lindor, octavo en el sorteo de 2011 con bono de $2,900,000, que el analista beisbolero Tom Verducci, de Sports Illustrated, publicó en la primavera de 2017 que Cleveland contemplaba otorgarle una extensión por $100,000,000, lo cual no fue afirmado, ni desmentido por el club.
Entretanto, Báez quedó detrás de Lindor en 2011, con $2,600,000, mientras Rosario no fue tan agraciado y Minnesota le dio $200,000 al ser escogido en la cuarta ronda (135), pero ha aumentado de rango con su bateo, conectando un cuadrangular en su primer visita al plato el 6 de mayo de 2015.
De Correa superar sus lastimaduras y recuperar su ritmo ofensivo, incluso ahora en los playoffs, su proyección para 2022 sería vertebrada, lo que es prácticamente un hecho con Báez, Lindor y Rosario.
El relevista Edwin Díaz, por su parte, obtendrá un aumento gordo en 2020, en su debut para arbitraje, ya que sus 57 salvamentos son su salvavidas en el mar picado de los pactos jugosos.
Nada, que valga la redundancia, nadarán en dinero en un futuro cercano y abonarán a la fama merecida de Puerto Rico como cuna de estrellas en las Mayores.