Explo$ivo el futuro de Alberto Machado
No es común que Miguel Cotto y su último gurú, Freddie Roach regalen sonrisas, pero la noche del sábado pasado mostraron una alegría jacarandosa sobre el ring del Madison Square Garden luego que su pupilo Alberto Machado destrozara a su retador Yuandale Evans en el mismísimo primer asalto.
El monarca regular de las 130 libras de la AMB, apodado El Explosivo, lo tumbó en tres ocasiones, obligando al referí Ricky González, nacido en Nueva York pero de origen boricua y expolicía durante más de dos décadas, a declarar el KO sin siquiera empezar el conteo al darse cuenta que Evans quedó boca arriba en mal estado físico, producto de la última caída de un derechazo curvo al maxilar izquierdo.
De hecho, Machado, que mide 5-10, gusta de combatir del lado prohibido a pesar de ser diestro, y la mayoría de sus derrotados, 21, con 17 antes del límite, ha estado más pendiente a sus rectos de zurda, y cuando comprueban la potencia de su derecha normalmente ya es tarde.
Gervonta Davis, invicto en 20 riñas, posee el título súper de dicha categoría en el mismo organismo, y es apadrinado por Floyd Mayweather, imitando las majaderías de este, pero con esgrima y pegada, que le valió para sacar del trono de la FIB a José Pedraza por la vía rápida en el séptimo giro, pero quedándose sin esta corona al no dar el peso requerido en su segunda defensa.
Por el momento, Machado, natural del residencial Monte Hatillo, no ha dicho que gustaría enfrentar a Davis, pero Jim Lampley y Roy Jones, Jr., del moribundo HBO, comentaron que una confrontación suya con Vasyl Lomachenko, en 135, quien tiene en agenda a Pedraza, sería una reyerta espectacular por la velocidad relampagueante del ruso y la dinamita existente en los nudillos del flaco de la 65 de Infantería.
Machado, que cobró $175 mil, tiene un futuro promisorio y su asociación con Miguel Cotto y Golden Boy Promotions, unido al prestigio de Roach, le puede tender una alfombra con el verde del dólar. En fin, está en ruta de la prosperidad por derecho propio.