Lin-Manuel en el Teatro UPR
La abrupta mudanza de la obra musical “Hamilton” de las tablas del histórico Teatro de la Universidad de Puerto Rico (UPR) no debe verse como un evento trágico para el futuro del principal centro docente del país sino como una ventana de oportunidades para volver a presentar obras de teatro y eventos artísticos a costos económicos para los asistentes.
La salida de “Hamilton” no significa la paralización de las obras de rehabilitación del teatro y el cuadrángulo histórico del recinto riopedrense. Por eso, sugiero que durante las fechas en que esa producción se presente en el Centro de Bellas Artes de Santurce, suba a escena en el Teatro de la UPR una obra puertorriqueña de primera calidad con los principales actores del país que son egresados del histórico recinto.
Otra opción para ayudar a la UPR puede ser donar toda la escenografía de “Hamilton” a la Universidad, cuando terminen las presentaciones en el Centro de Bellas Artes de Santurce para presentar una versión criolla de la obra bajo la propia dirección de Lin-Manuel Miranda, dando así lo más valioso que puede dar al país, su tiempo, su inspiración y su amor por la isla.
Esta crisis es una oportunidad única de mostrar al país una UPR abierta y que busca mediante una actitud de apertura convertirse en parte de las soluciones y no seguir con su actitud de aislamiento y cierre que los ha llevado a tener una imagen muy negativa en la inmensa mayoría del país.
Si el teatro del recinto riopedrense logra volver a brillar con obras dirigidas por Lin-Manuel y al llevar a esas tablas obras puertorriqueñas de primera calidad estoy muy seguro que en un futuro la mudanza de “Hamilton” para el Centro de Bellas Artes santurcino habrá sido lo mejor que le pasó al teatro de la UPR.
Yo no pierdo la esperanza y fe en mi alma mater.