Declive que llegó a los 25 años
Debido a su temprano arranque como ‘teenager’ en el boxeo, el final de la carrera de “El Radar” llegó a una edad inusual
El intento de Wilfred Benítez por coronarse en su cuarta división se vino abajo cuando el 16 de julio de 1983 fue vencido vía decisión unánime por Mustafa Hamsho, primer clasificado del Consejo Mundial de Boxeo en las 160 libras. Don Goyo no estaba en su esquina, ya que se habían separado profesionalmente.
La derrota ante Hamsho fue prueba de que, con menos de 25 años —edad a la que muchos otros boxeadores élite están entrando a la cúspide de sus carreras— Benítez estaba acabado como boxeador de primer nivel.
Con sus habilidades mermadas drásticamente a pesar de que había recibido relativamente poco castigo como profesional, especialmente en comparación a contemporáneos como Alfredo Escalera y Roberto Durán, Benítez siguió peleando. Derrotas ante Davey Moore y Matthew Hilton, peleadores sólidos pero lejos de la calidad de El Radar de antaño, fueron seguidas por un penoso incidente en Argentina.
Fue allí que el 28 de noviembre de 1986 fue noqueado en siete episodios por Carlos Herrera. Para añadirle insulto a la injuria, el promotor de la pelea se desapareció sin pagarle a Benítez y sin devolverle los documentos de visado. Por estas razones, Benítez permaneció un año varado en Argentina.
Benítez peleó por última vez el 18 de septiembre de 1990 en el Centro de Convenciones de Winnipeg, Canadá. Scott Papasodora lo venció por decisión unánime.
Terminó su carrera con marca de 53 victorias, ocho derrotas y un empate. Un total de 31 de sus triunfos fueron por nocaut. En el 1996, fue exaltado al Salón de la Fama del Boxeo Internacional de Boxeo en Canastota, Nueva York.
Actualmente, tras sufrir varios percances de salud, Benítez reside en Chicago atendido por su hermana Yvonne.
El excampeón sufre de encefalopatía traumática crónica, producto de los golpes que recibió en su carrera.