El Nuevo Día

Unidos por el deporte Benito Santiago, padre e hijo

El exreceptor de las Grandes Ligas quería que su hijo fuera pelotero, pero lo apoyó en su decisión de ser baloncelis­ta

- JORGE FIGUEROA LOZA jorge.figueroa@gfrmedia.com Twitter: @jorgefloza

Benito Santiago siempre quiso que su primer hijo varón, Benito Jr., fuera pelotero.

Con un padre estelar en las Grandes Ligas durante dos décadas detrás de la receptoría, el ahora canastero de los Vaqueros de Bayamón en el BSN se crió en un escenario ideal para cumplir el deseo de su progenitor.

Empero, durante los veranos que Benito Jr. se iba de gira —junto a su hermana mayor (Benivette)— para acompañar al otrora receptor a los diferentes estadios de las Mayores, su mirada se desviaba de los partidos de béisbol para apreciar juegos de la NBA en los monitores de los parques.

“Viendo un juego entre San Francisco y Atlanta, pusieron en la televisión uno de baloncesto. Me puse a ver los dos y me quedé pegado viendo el de baloncesto. Ya en la escuela secundaria empecé a jugar los dos. Estaba entre uno y el otro”, relató el joven alero que cumple 30 años, el 22 de junio.

Al principio, Benito insistió en que su hijo le siguiera los pasos en la disciplina que le dio fama. Pero en el camino —y como el padre que desea lo mejor para sus retoños— desistió de la idea para que Benito Jr. persiguier­a su sueño de ser baloncelis­ta.

“Me hizo lucir bien porque al principio le dije ‘no, papi. Vamos para esto (para el béisbol)’. Se ha ganado el mérito que se debe y lo ha hecho todo por él mismo”, expresó el exjugador de los Padres de San Diego con orgullo, tras un reciente partido de los Vaqueros en el coliseo Rubén Rodríguez.

Hoy, en el marco del Día de los Padres, el exgrandesl­igas —que jugó 20 temporadas con nueve equipos y fue nombrado Novato del Año de la Liga Nacional en 1987 con los Padres, resaltó el deber de los padres en apoyar a sus hijos e hijas en cualquier carrera que decidan perseguir.

“El entusiasmo (de Benito Jr.) siempre lo vi en el baloncesto. Había que dejarlo que se establecie­ra en lo que quería hacer. Uno como padre no debe exigirle que haga un deporte cuando quiere jugar otro. Eso lo vi porque siempre le gustó el baloncesto. Jugó buena pelota. En ese aspecto, yo tengo que pensar y agradecer lo que él quiere ser. Si fue el baloncesto, pues lo dejé en el baloncesto. No me podía meter en el medio porque él dio todo por el todo. Él hizo bien. Está contento en lo que está haciendo hoy día”, sostuvo el exreceptor, de 54 años.

Benito Jr., por su parte, agradece el apoyo incondicio­nal de su padre a través de los años para destacarse en el baloncesto local, cuando atraviesa su séptima temporada en el BSN.

“Yo fuera un hombre perdido si no fuera por él. Mi hermana mayor me llevó también toda la vida porque la seguí. Él pudo dar los consejos mientras crecía y todo

eso me ayudó a estar donde estoy en estos momentos”, aseguró.

INTENTÓ LA PELOTA

Poniendo su deseo de jugar baloncesto en alto, Benito Jr. le dio una oportunida­d al béisbol, cuando se destacó como primera base en la Universida­d Lon Morris de Jacksonvil­le, Texas, donde le dieron el visto bueno de jugar ambos deportes. En el 2010, registró promedio de .357 con cinco jonrones, 23 carreras impulsadas y 26 bases robadas.

“Papi estaba por todos lados jugando, y yo era el batboy de él y del equipo. Vi a muchos jugadores estrellas... Ken Griffey... Barry Bonds. Y toda mi vida mirando la vida del pelotero, pues me dije que iba a seguir los pasos de papi”.

En el 2010, Benito, Jr., fue reclamado por los Cubs de Chicago en la ronda 31 del sorteo de Novatos de las Mayores, pero nunca firmó con la organizaci­ón.

“Algo pasó cuando me selecciona­ron (los Cubs). Me soltaron y lo vi como una señal. No me querían firmar. Tenía también un contrato ‘undrafted’ con Seattle. Me escogió Chicago y tuve que romper el contrato de Seattle. Salí perdiendo con los dos”, contó.

“Yo fuera un hombre perdido si no fuera por él. Él pudo dar los consejos mientras crecía y todo eso me ayudó a estar donde estoy”

BENITO SANTIAGO JR. EL JUGADOR DE LOS VAQUEROS SOBRE SU PADRE, EL EXPELOTERO DE GRANDES LIGAS

APOYO EN EL BÁSQUET

Benito Jr. regresó a la universida­d, esta vez a Cumberland en

“Me hizo lucir bien porque al principio le dije ‘no, papi. Vamos para esto (para el béisbol)’. Se ha ganado el mérito que se debe y lo ha hecho todo por él mismo”

BENITO SANTIAGO EXRECEPTOR DE GRANDES LIGAS

Williamsbu­rgh, Kentucky. Activo en el tabloncill­o colegial, Benito, padre, pudo ver la seriedad que le ponía su hijo al baloncesto.

“A base de lo que yo hice, estoy muy contento por él. Él ha puesto todo el entusiasmo, como debe ser para las personas que quieran superarse. Lo ha hecho. Lo vi jugando baloncesto en la universida­d. Me tiene bien contento por la manera que actúa y juega, se deja querer”, dijo Benito, padre, a quien apodan “Beno”

“Un hijo te lleva a ti a ser lo mejor que puedes ser en el mundo para el muchacho. Son cosas que yo no tuve cuando era pequeño. Fui criado en otra familia. Yo quería que saliera pelotero, pero tenía que entender lo que él quería hacer en el futuro y eso es lo más importante en la vida de un hijo”, dijo el también Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en el 2002 con los Giants de San Francisco.

Benito Jr. debutó en el BSN en el 2013 con los Indios de Mayagüez. Al año siguiente, pasó a los desapareci­dos Maratonist­as de Coamo para luego brincar a los Atléticos de San Germán, donde estuvo tres temporadas.

En 2017, fue cambiado a los Vaqueros, equipo en el cual ha demostrado su mejor nivel en los últimos dos años. En 2019, registró sus mejores números en la fase regular al promediar 17.8 puntos con 3.5 rebotes y 2.6 asistencia­s.

BENITO COMO ‘COACH’

Parte de su progreso se lo debe a su padre, a quien considera como un ‘coach’. “En todas las situacione­s que he pasado, como refuerzo, como novato, en los playoffs (del BSN), él entiende la mentalidad porque ha estado en el mismo escenario sin importar que es otro deporte. Siempre ha estado ahí. Sabe de baloncesto también. Cuando tengo juegos buenos o malos, siempre lo consulto. Es como mi coach también. Siempre hemos tenido la relación así, siempre pegados y cada día se pone más fuerte”, resaltó Benito Jr.

Para hoy, Benito, padre e hijo, no tienen grandes planes para celebrar el Día de Padres. Según Benito, padre, en el deporte no se le da mucha importanci­a por los compromiso­s de juegos durante la campaña. “Los deportista­s no llevan eso en serio porque en esos días uno puede estar jugando, estar fuera. No lo lleva, no lo anhela. Sí, se quiere pasarla bien con la familia, pero cuando uno está en el deporte todo eso se va. Son cosas que pasan y uno no puede ponerse negativo. Nos llamamos. Eso es lo más importante”.

Benito Jr. tiene libre hoy y piensa bajar con su hijo, Maximus, a Santa Isabel para que menor de dos años comparta con su abuelo. “Ya firmó con papi. Ya lo tiene. Mi hijo va a ser pitcher parece. Estoy tranquilo con eso”, bromeó.

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 ?? Jorge.figueroa@gfrmedia.com ?? Benito Santiago, padre, asiste a los juegos de los Vaqueros en el BSN para apoyar a su hijo.
Jorge.figueroa@gfrmedia.com Benito Santiago, padre, asiste a los juegos de los Vaqueros en el BSN para apoyar a su hijo.

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