El peligro de las vitaminas antioxidantes
Muchas personas consumen vitamina C por boca desconociendo que si albergaran un cáncer oculto, ese suplemento podría estimular el crecimiento del tumor”
Recientemente se celebró la reunión anual del ASCO (American Society of Clinical Oncology), un congreso internacional donde se discuten los adelantos más importantes en el campo del cáncer. Alrededor de 50,000 personas asistieron. El trabajo que recibió el premio “Ciencia de la Oncología” se le otorgó a la Dra. Joan Brugge de Harvard y trata un tema sumamente curioso: “Manejo del estrés por las células tumorales durante la progresión y resistencia a la terapia”. Aunque no lo crean, las células cancerosas también padecen de estrés. ¿Qué les causa estrés y como logran sobreponerse? Veamos.
Las células malignas constantemente tienen que luchar para escapar de la muerte. Con el fin de comenzar el proceso de metástasis, deben salir del medio ambiente donde se criaron, y al hacerlo, se sienten desubicadas. Se les trastorna la vida hasta el punto de que no pueden alimentarse del azúcar y esto genera una gran cantidad de “estrés oxidativo” que les causa la muerte. La Dra. Brugge descubrió que al proporcionarles antioxidantes, les salvaba la vida a las células cancerosas.
Por varias décadas se nos ha vendido la idea que los suplementos antioxidantes son espléndidos para combatir el cáncer, pero resulta que salvan al cáncer en vez de protegernos. La doctora hizo hincapié en las consecuencias peligrosas de estos antioxidantes al permitirle a las células malignas sobrevivir. ¿Y cuáles son los principales antioxidantes? Los primordiales son las vitaminas C, A y E. La A y la E, en dosis altas, pueden causar cáncer de pulmón y próstata respectivamente. Me referí a esto en otra columna y ahora finalmente tenemos una explicación.
Muchas personas consumen vitamina C por boca desconociendo que si albergaran un cáncer oculto, ese suplemento podría estimular el
crecimiento del tumor. Muchas personas tampoco comprenden que si están recibiendo quimioterapia o radioterapia, los antioxidantes podrían crear resistencia a esos tratamientos.
Durante la reunión del ASCO, fueron muchas las presentaciones y muy excitantes los adelantos terapéuticos que, por falta de espacio, no puedo reseñar. Pero para mí, el punto culminante de la reunión fue el concierto de rock por la banda “The Checkpoints”. Detrás del nombre de esta banda hay una historia fascinante. El fundador y director es nada menos que un Premio Nobel de Medicina, el texano Dr. James Allison. Sabemos que las células del sistema inmune pueden activarse para atacar las células cancerosas. El Nobel se le otorgó en 2018 por su hallazgo de que las células cancerosas han desarrollado un mecanismo con el cual se defienden de este ataque, inactivando el sistema inmune. Allison descubrió que los linfocitos del sistema inmune tienen unos “checkpoints” o puntos de cotejo donde presentan sus credenciales a las células malignas y estas últimas intentan montar un contraataque. El descubrió el primer punto de cotejo, que fue lo que le ganó el premio Nobel de Medicina. Este descubrimiento ha tenido un impacto decisivo en el desarrollo de la inmunoterapia que está revolucionando el manejo del cáncer. Además de descubrir estos “checkpoints”, Allison fundó una banda de rock con ese mismo nombre.
Tuve el privilegio de asistir a un concierto de la banda “The Checkpoints” durante el ASCO y a pesar de que no es mi género de música favorito, quedé sumamente impresionado. Pensaba que esta banda era un simple pasatiempo, pero mi sorpresa fue enorme cuando evidencié la gran seriedad y modestia con que Allison se conducía durante el concierto. Con sus largas greñas blancas sueltas, Allison representa la viva imagen de un “mad scientist”. Tenía un estuche con ocho armónicas y una lista de canciones. Él seleccionaba la armónica de acuerdo con la canción. Esto no era un “vente tú”, era un concierto profesional de tres horas de duración con una banda compuesta por nueve músicos, todos inmunólogos reconocidos, incluyendo al Dr. Patrick Hwu, director de la División de Medicina del Hospital MD Anderson en Houston. La pasión de Allison por la ciencia es comparable con su pasión por la música. A pesar de que no soy amante de esas canciones, el concierto sobrepasó por mucho mis expectativas y las de mis dos hijas que son aficionadas a ese género.
En la audiencia se encontraba la doctora Padmanee Sharma, esposa de Allison, quien disfrutaba bailando sin parar. Sus antepasados son de India, pero su historia es todavía más interesante que la de su esposo. Nació en la Guyana Británica. Yo desconocía que para el 1838, cuando se abolió la esclavitud en Guyana, los ingleses secuestraron 240,000 nativos de la India y los transportaron a esa isla para cultivar la caña de azúcar en condiciones de esclavitud. Con mucha pasión, logró sobreponerse a multitud de vicisitudes, estudió medicina en Nueva York, y luego oncología. Actualmente ambos trabajan en MD Anderson donde el dirige el Depto. de Inmunología y ella trabaja en el Depto. de Oncología Genitourinaria, brillando por su propia luz.
En fin, el ASCO 2019 fue muy aleccionador… pero la gran lección la dieron Allison y Sharma en un concierto de rock: lo que hagas, no importa que sea, hazlo con pasión y profesionalismo … ya sea soplar la armónica, bailar, o curar el cáncer. La pasión precede y define el éxito.