EL CORAZÓN DEL HOGAR
En un hogar, el comedor se define como un espacio de encuentro y de reunión familiar. Es un lugar que promueve la convivencia.
Sin embargo, en ciertos hogares hoy el comedor es un espacio que ha perdido su función pues la familia no se reúne a comer.
¿Al visitar alguna casa, ha observado la mesa del comedor llena de papeles, cartas y bultos?
Para mí como arquitecta, al igual que para muchas familias, ese espacio sigue teniendo su función y sigue siendo el comedor de siempre.
La historia de nuestra arquitectura nos demuestra la gran importancia de este espacio en la planificación y concepción del diseño de una casa.
El hogar se visitaba a modo de procesión, desde el balcón, como espacio de transición del exterior al interior, hasta pasar por la sala, por las habitaciones, alrededor de un patio interior, y culminar en el espacio del comedor como punto importante de reunión.
¡Si como visita te permitían llegar hasta el recinto del comedor, habías logrado entrar al corazón de dicha familia!
De esta forma, la arquitectura demuestra su objetivo humano y social. Diseñamos para enaltecer la vida del ser humano, reconociendo también lo práctico y los cambios sociales.
Hoy se come en “el family”, frente al televisor, o cada quien se lleva la comida a sus cuartos, convertidos en pequeños apartamentos dentro de las casas.
¿Debe prevalecer el espacio del salón comedor o debe anexarse a otros, como ocurrió con el balcón?
Para mí, el comedor siempre será el corazón de la familia y no debemos relegarlo como espacio vital del hogar, ni borrarlo de nuestra historia.
Este próximo Día de Acción de Gracias, periodo que se asocia con el compartir familiar y el buen comer, prepara espacios agradables, acogedores y decorados en toda la casa, empezando por el comedor.
Así promoveremos que perdure la unión familiar y la amistad por siempre.
Demos gracias a Dios por las bendiciones que nos brinda como pueblo.