¿Bhatia vs Yulín?
Eduardo Bhatia salió bastante al frente de Carmen Yulín Cruz en La Encuesta El Nuevo Día recién publicada, pero eso no quiere decir que hoy le ganaría la primaria. Los seguidores de Yulín llevan tiempo respaldándola y un por ciento muy alto de ellos irán a votar. En contraste, muchos de los que expresan apoyo por Bhatia en la encuesta no lo apoyaban hace seis meses, por lo que ese apoyo debe todavía carecer del entusiasmo que los saca a votar. Pero la primaria no es hoy ni mañana, es en siete meses.
Todo apunta a que la primaria a la gobernación del Partido Popular Democrático será entre ellos dos. Hoy hay cuatro candidatos y todavía queda tiempo para que anuncien otros, pero los eventos de las pasadas semanas sugieren que al final los que importarán serán Bhatia y Yulín.
En el Partido Popular ha habido dos opiniones sobre cómo evolucionaría la primaria. Una plantea (o planteaba) que la votación se daría muy dividida entre tres o cuatro de los candidatos. Esa división aumentaría las posibilidades de una victoria de Yulín, quien tiene un apoyo minoritario pero firme.
La otra opinión sostiene que Yulín no tiene posibilidades de ganar las elecciones generales y que los populares que no la apoyan eventualmente cerrarían filas detrás de una de las alternativas para derrotarla.
En septiembre me enseñaron una encuesta independiente hecha en agosto que ya colocaba a Bhatia por encima de Yulín, por un margen más estrecho que el de la encuesta más reciente de este periódico. Haciendo la salvedad de que se trata de encuestas hechas por encuestadores diferentes, los resultados vistos en conjunto sugieren que la campaña Bhatia ya estaba despegando para agosto.
Eso apunta a que Bhatia viene consolidando el apoyo popular de los que no quieren que la candidata sea Yulín. El evento más significativo ocurrido desde la encuesta, el retiro de Roberto Prats de la contienda, indica que eso va en aumento,
Según la encuesta, Prats tenía un 8% de los votos. Esa es una cantidad considerable de votos que de pronto queda libre y sale en la búsqueda de otro candidato a apoyar. Hay que ver cómo manejaron este momento importante los tres candidatos restantes principales.
Charlie Delgado, inexplicablemente, se mofó de Prats. Más o menos dijo que hacía tiempo se debió haber salido. Eso fue un comentario inusual en una primaria pues despreció a los seguidores de Prats en vez de salir a buscarlos.
Yulín, en contraste, fue elegante y felicitó a Prats. Ella sabe que es improbable que los electores de Prats migren hacia ella, pero optó por hacerlos sentir bien, lo cual es lo sensato. No iba a gratuitamente facilitarles que se fueran con otro candidato. Ella además tiene una buena relación personal con Prats y nunca la he visto dejar que las riñas de partido se antepongan a esos sentimientos.
Bhatia fue quien sin duda le sacó mayor partido a ese retiro. Se entiende que lo natural es que los seguidores de Prats se vayan con Bhatia porque las posturas de ambos son similares. De modo que ni Prats tenía que endosar públicamente a Bhatia, ni Bhatia tenía que recibir el endoso en una actividad suya para que eso sucediera. Pero se sentaron y acordaron que el retiro y el endoso se hiciera de manera simultánea con los dos presentes. Eso acelera ese traspaso del apoyo y fomenta la noción de que Bhatia se encamina a una victoria.
Pero regreso al principio. Yulín aventaja a Bhatia en motivación de sus electores. Ahí el reto de Eduardo para los próximos siete meses.
“Hoy hay cuatro candidatos y todavía queda tiempo para que anuncien otros, pero los eventos sugieren que al final los que importarán serán Bhatia y Yulín”