A todo vapor las inspecciones
Educación apuesta a conocer la semana que viene qué escuelas están aptas para reabrir
Las clases en las escuelas públicas que sean certificadas como seguras por ingenieros arrancarán el semestre en poco más de una semana, luego que el secretario de Educación anunciara que las clases comenzarán el 22 de enero.
No obstante, aún se desconoce cuáles escuelas estarían listas para recibir a sus estudiantes.
La información se sabrá a partir de la próxima semana, cuando se prevé que se den a conocer los resultados de las inspecciones que ingenieros contratados por tres dependencias de gobierno realizan para determinar la seguridad de los planteles, señaló el secretario de Educación, Eligio Hernández Pérez.
“Tenemos un compromiso con la seguridad de nuestras comunidades escolares y queremos garantizar que todos los centros educativos e instalaciones del Departamento de Educación hayan sido inspeccionados por ingenieros licenciados”, señaló Hernández Pérez.
El secretario detalló que los maestros deberán reportarse a las escuelas que sean seguras el martes, 21 de enero.
El recién creado Comité Interagencial de Inspección de Escuelas, liderado por el ingeniero Carlos Pesquera, será el ente que hará las recomendaciones sobre cuáles escuelas están aptas para recibir estudiantes.
Tanto Hernández Pérez como la directora ejecutiva de la Autoridad de Edificios Públicos (AEP), Melitza López Pimentel, defendieron ayer las inspecciones a las estructuras gubernamentales, al destacar que solo estarán en manos de profesionales en ingeniería.
LAS CERTIFICACIONES
Las inspecciones comisionadas por el gobierno para asegurar la estabilidad de estructuras gubernamentales tras los sismos de los pasados días van dirigidas tanto a identificar los posibles daños que sufrieron los edificios como a recomendar las mejoras que se requieren para que sean seguros, indicaron profesionales encargados de estas tareas.
Pesquera sostuvo que estas evaluaciones permitirán identificar dónde están las escuelas más vulnerables y crear un plan para reforzar sus estructuras, lo que tomaría meses. Cada escuela podría necesitar una inversión entre $1 millón y $5 millones, estimó.
“Puerto Rico ha llegado a la conclusión de que esto es prioritario y hay que buscar recursos, ya sean locales, sean los recursos guardados para pagar la deuda o fondos federales para atender esto con urgencia. Entiendo que el tema de los recursos es fundamental y significativo”, manifestó Pesquera.
Las inspecciones se dividirán en dos fases, señaló el director interino del Área de Desarrollo de Proyectos de la AEP, el ingeniero Gerardo Crespo.
La prioridad son las escuelas públicas, manifestó el funcionario.
“Estamos trabajando con todos nuestros recursos internos y estamos en proceso de contratación de otros recursos adicionales para acelerar, en la medida que sea posible, los trabajos sin afectar la veracidad y la seguridad de los reportes”, indicó Crespo.
La fase 1 consta de inspecciones oculares para identificar los daños visibles que los temblores de la última semana, que han afectado principalmente municipios de la zona sur y suroeste, han provocado sobre estructuras como escuelas públicas, centros de gobierno, cuarteles de la Policía, o centros judiciales. En la fase 2, ingenieros estructurales harían pruebas más técnicas y rigurosas en las estructuras en las cuales se hayan identificado daños moderados o severos para que determinen el curso de acción, explicó Crespo.
Tanto las del nivel intermedio como el más severo pasarían a una evaluación para recomendar las medidas que se deben tomar para reparar los daños -de ser posiblesy estimar el costo de dichos trabajos, señaló Crespo.
“(La fase 2) puede incluir hacer pruebas, buscar información, buscar los planos existentes, hacer pruebas de campo, pruebas destructivas para identificar esas posibles fallas y ver si eso que aparenta ser un defecto lo es”, señaló el ingeniero José Green, de la empresa Green Engineering Group, una de las dos contratadas hasta el momento por la AEP.
Las inspecciones comenzaron el miércoles y aún es demasiado pronto para precisar cuáles estructuras necesitan estudios más complejos, señaló el ingeniero José Raul Gayá, otro de los contratados por AEP.
Educación detalló que, al menos, 50 ingenieros están a cargo de las inspecciones.