Nocivo cancelar las fiestas de la calle San Sebastián
Los terremotos sin nombres del día de la fiesta de Reyes y sus múltiples réplicas causaron un desastre y emergencia en la isla, en particular en la zona sur. La economía se paralizó varios días por la pérdida de energía eléctrica.
Con mucho pesar por los daños emocionales y físicos que causaron los terremotos, las fiestas de la calle San Sebastián no fueron canceladas y continúan en pie esta semana, del miércoles 15 al domingo 19 de enero, en su lugar tradicional en el Viejo San Juan, sin aguafiestas y sin problemas estructurales emocionales.
Las fiestas de la calle San Sebastián cumplen 50 años y son fuente de ingresos importantes para pequeños comerciantes, artistas y artesanos.
Juntos y unidos como pueblo, vamos a la celebración de las fiestas con fuerza, en la histórica y amurallada ciudad antigua de San Juan Bautista. La SanSe no fue cancelada por el perjuicio que implicaría para el turismo y la economía de la isla.
Estas son las más grandes fiestas de Puerto Rico, que superaron la noche de San Juan que promovió Doña Fela, quien nos enseñó la nieve del norte en la parada 8 en Puerta de Tierra, en la isleta de San Juan.
Somos un pueblo de tradiciones, de artistas y artesanos fiesteros de carnaval alegre de enero, a pesar de que un manojo de ñángaras amargados, río arriba, aguafiestas, están siempre en contra de todo, incluso de la felicidad de las fiestas de la calle San Sebastián.
Los temblores recurrentes en la isla son una experiencia novedosa para los habitantes de la isla. Tenemos que superar el miedo a los terremotos y sus réplicas. El día de los Reyes Magos reyamos con temblores en Juana Díaz y en el Castillo de San Felipe del Morro.
Los terremotos no detienen el 50 aniversario de las fiestas de la calle San Sebastián en la antigua ciudad de San Juan, que también celebra su quinto centenario en su máxima expresión cultural puertorriqueña afroantillana.
La ansiedad colectiva por estos tiempos revueltos de temblores debe mitigarse con la alegría de nuestras fiestas de la calle San Sebastián sin riesgos estructurales en los castillos San Felipe, San Cristóbal y San Gerónimo, edificios centenarios y las bellas plazas de San José, de Armas, La Barandilla y Colón. Detener y cancelar la SanSe afecta el turismo y la economía de Puerto Rico, que lleva una semana paralizada.
Los que tienen problemas estructurales emocionales son un manojo de personas que se oponen a todo, miran siempre contra el gobierno estatal o municipal y viven de pretender sembrar el terror. También se conocen como los terroristas líquidos izquierdistas. Pero, como dicen en el norte, “the show must go on”.
Iván Garau Díaz San Juan