Escasos los enseres y materiales de construcción en la isla
● El COVID-19 ha trastocado la cadena de suministros y afectado a los comercios, sobre todo a los pequeños negocios
¿Ha intentado conseguir un acondicionador de aire, televisor o nevera en estos días? Muchos de estos productos, así como cisternas, estufas y artículos de electrónica, entre otros, escasean y apenas se consiguen en los establecimientos comerciales.
Igual sucede con las puertas de aluminio, las planchas de cinc, tensores y cables para amarrar las casas, tuberías, y hasta paneles PVC y madera tratada.
¿La razón? Puede ser más de una, pero todas parecen estar ligadas al surgimiento del COVID-19, según los entrevistados.
“La escasez de materiales de construcción es una realidad, y la raíz del problema es la pandemia”, afirmó Jorge Pérez, socio de la ferretería Arilope ACE en Aguadilla, quien indicó que muchas fábricas están trabajando al 50% de su capacidad de producción por la situación del COVID-19, y algunas no han podido recuperar aún dicha capacidad.
Edwin Pabón, propietario de los negocios Joe’s Home Center en Vega Baja y Vega Alta y miembro del Grupo Construrama -que agrupa a 14 ferreteros en la isla-, dijo que desde principios de año comenzó la escasez en las ferreterías pequeñas. “Ahora mismo los mayoristas no tienen mercancía. Yo estuve dos semanas sin cisternas, bombas y tubería, y tenía que comprar a sobreprecio”.
Pabón es representante también de la marca GE y señaló que no hay suficientes estufas, neveras, congeladores, acondicionadores de aire, ni lavadoras. Señaló que las ventanas y puertas en aluminio también escasean.
El problema, según el comerciantes del Grupo Construrama, es que cuando hay un disloque en la cadena de suministros, como ocurre ahora con la pandemia, las grandes cadenas, como Home Depot y Walmart acaparan la producción limitada que hay en el mercado. “Cuando las cosas se ponen malas, las fábricas como por ejemplo Air Master, abren para suplirle solo a esas grandes compañías”, expresó.
“Estoy esperando plantas eléctricas, las pedí hace dos meses, y me dijeron que llegaron ayer (antier)”, agregó Pabón.
El Nuevo Día supo que compañías de distribución en el sector maderero de Estados Unidos han reducido su operación por problemas asociados al COVID-19.
DEPENDENCIA DE CHINA
Por su parte, Juan Bauzá, de las ferreterías True Value en Viejo San Juan y en la avenida Franklyn D. Roosevelt, comentó que Estados Unidos dependió demasiado de la producción de China porque era más barata y ahora con la pandemia, la cadena de suministros se ha impactado.
“Esta situación es a nivel mundial, pero está afectando mucho a Estados Unidos”, dijo Bauzá, al tiempo que indicó que True Value, con 15,000 tiendas en Estados Unidos y Puerto Rico, ha comenzado a explorar otras alternativas, entre ellas negociar con suplidores nuevos en países como México, Ecuador y Canadá. “Eso le va a dar vida a Latinoamérica y podría beneficiar a Puerto Rico”, agregó.
Mientras, Iván Báez, director de Asuntos Públicos y Gubernamentales de Walmart Puerto Rico, atribuyó la escasez de los enseres a una combinación entre una merma en producción y el aumento en demanda.
El COVID-19 ha provocado el cierre temporal de varias fábricas debido al contagio de empleados, lo que ha interrumpido la producción y reducido los niveles de inventario; pero por el otro lado, al haber un mayor número de consumidores en sus casas, estos han aprovechado el momento para hacer reparaciones y arreglar sus hogares.
AYUDA EL ESTÍMULO FEDERAL
“La demanda ha sido grande, hay categorías que se han disparado hasta 200%, como la de televisores, estufas, neveras y electrónica. Llegó un momento en que no había televisores. Los topes de cocina también se han ido rápido. El hábito de consumo ha cambiado dramáticamente y la demanda sigue alta, no ha bajado”, aseveró Báez.
Los consumidores han utilizado parte del paquete de estímulo federal que han recibido para comprar enseres y hacer las mejoras en el hogar. “Si llegara un segundo paquete de estímulo federal, te aseguro que se vuelve a disparar la demanda”, añadió Báez.
Walmart, al igual que True Value, ha diversificado su lista de suplidores, y en el caso de la megacadena, ha expandido la contratación de más empresas locales, aseguró el portavoz de la empresa.
Aunque es incierto todavía saber cuándo se reducirán los contagios del COVID-19 a nivel global, Báez estima que los suministros de enseres comenzarán a estabilizarse a fines de este mes.
“La escasez de materiales de construcción es una realidad, y la raíz del problema es la pandemia” JORGE PÉREZ SOCIO DE FERRETERÍA ARILOPE ACE