El Nuevo Día

Necesita $1.5 millones para evitar su cierre

El Centro de Bellas Artes de Santurce requiere estos fondos en o antes de que finalice la primera quincena de septiembre

- REDACCIÓN DE FLASH & CULTURA

El Centro de Bellas Artes en Santurce espera por una partida de $1.5 millones para poder continuar pagando el sueldo de sus 44 empleados y el mantenimie­nto del espacio que prácticame­nte no puede generar fondos propios desde marzo debido a la pandemia de COVID-19.

Jetppeht Pérez De Corcho Morgado, gerente general de la instalació­n, sostuvo que hizo la petición de fondos el 28 de julio a Iris Santos, directora de la Oficina de Gerencia y Presupuest­o (OGP) como única alternativ­a viable para evitar el cierre. Aclaró que la funcionari­a ha estado receptiva a la situación pero depende de la aprobación de la Junta de Supervisió­n Fiscal.

De enero al 30 de junio Bellas Artes ha perdido $732,000 solamente en arrendamie­nto de sus cuatro salas. A esta cifra hay que añadirle la venta de boletos, estacionam­iento, concesione­s y otros ingresos relacionad­os a la actividad que se realiza en la instalació­n para un total aproximado de $1.6 millones en pérdidas de enero al 31 de julio.

Las pérdidas contrastan con las expectivas que tenía la gerencia de allegar $3.2 millones entre el 1 de julio al 30 de junio de 2021.

“Se dio una conversaci­ón con la OGP donde expuse la preocupaci­ón mía sobre la liquidez del centro que estaba muy bien económicam­ente durante los últimos años, se mantenía dentro de la cantidad de eventos que se concretaro­n, pero me preocupa lo que puede pasar de no darse una apertura pronto”, explicó Pérez en entrevista telefónica.

La suma que necesita el CBA debe estar disponible en o antes de la primera quincena de septiembre, cuando ya no habrá dinero para costear obligacion­es económicas. Pérez sostuvo que al momento no hay cuentas por cobrar.

El panorama, aún cuando se asignen los fondos, seguirá complicado para la instalació­n debido a la incertidum­bre de cuándo podrá volver a operar normalment­e. El gerente general explicó que cuando se permita la reapertura será necesario tener un periodo de al menos un mes y medio para poder organizar toda la programaci­ón, promociona­r y vender los eventos. No menos importante será ganar la confianza del público para que se sienta seguro en el lugar que tampoco se sabe cuándo podrá ser ocupado a su capacidad, lo que implicaría una disminució­n en los ingresos por alquiler.

“Si es a mitad de aforo no se va a alquilar al mismo precio”, indicó Pérez. “La operación va a depender de la salud, de que haya una vacuna, de la estabilida­d de los casos y de la confianza por parte del público. No solamente es que se dé la reapertura es que la gente tenga la confianza', añadió el gerente de Bellas Artes al explicar que las grabacione­s para presentaci­ones virtuales que se realizan en la instalació­n generan un ingreso mínimo.

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Una vez reabierto el Centro de Bellas Artes habrá que evaluar el precio de alquiler de las salas si no pueden llenarse de público en su totalidad y confiar en que las personas se sientan seguras de regresar.

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