Empresario acusado por delitos sexuales contra menores
Jorge Javier Marrero Gerena también enfrenta cargos por incitar a una adolescente a incurrir en conducta sexual e intentar lo mismo con otros tres menores de edad
Un gran jurado acusó al dueño de la empresa Yatea, Jorge Javier Marrero Gerena, por inducir a una adolescente a incurrir en conducta sexual e intentarlo con otras tres menores de edad.
En el mismo pliego, se acusó a Marrero Gerena, quien fue arrestado ayer por agentes de la Oficina de Investigaciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE-HSI), de un cargo de producción de pornografía infantil.
Ayer, la madrugada de la tranquila urbanización Vistamar en Carolina se iluminó con luces azules de los vehículos oficiales que llegaron en silencio y en pocos minutos se marcharon con Marrero Gerena abordo.
El empresario pasará el fin de semana largo ingresado en el Centro Metropolitano de Detención (MDC) en Guaynabo hasta la vista inicial, pautada para el martes en la tarde.
En esa audiencia se sabrá si quedará sumariado en prisión mientras dure el caso o le permitirán salir bajo fianza, lo que no suele ocurrir en casos que incluyen los cargos que enfrenta Marrero Gerena.
El pliego alega que el empresario usó la cuenta de Yatea PR en Instagram y la aplicación de mensajería WhatsApp para comunicarse con -al menos- tres menores mediante mensajes de texto.
Uno de los cuatro cargos alega que, el 8 de febrero de 2020, el acusado indujo a una adolescente de 16 años a “incurrir en una conducta sexual explícita para el propósito de producir una representación visual de esa conducta”.
Por estos mismos hechos, el pliego acusa a Marrero Gerena por un cargo de producción de pornografía infantil.
Mientras, otro cargo se basa en alegaciones sobre mensajes enviados por el acusado a una menor de 13 años entre el 6 y el 16 de noviembre de 2019.
Alega que Marrero Gerena “usó su teléfono celular y el internet para enviar mensajes de texto para tratar de persuadir, inducir, incitar y coerción de un individuo que se entiende era una menor de 13 años de edad para incurrir en actividad sexual por el cual el acusado puede ser acusado criminalmente”.
En otro cargo, se alega que Marrero Gerena hizo acercamientos a otra víctima entre noviembre de 2019 y febrero de 2020. Además, se denuncia que, utilizando el teléfono, realizó el mismo acercamiento con una menor de 15 años para intentar que incurriera en una actividad sexual.
De resultar convicto, el empresario se expone a una sentencia de entre 15 a 30 años de prisión por el cargo de producción de pornografía infantil. Por los otros tres cargos, se expone a sentencias de 10 años a cadena perpetua.
“La coerción y tentar a menores a través del internet y dispositivos electrónicos a incurrir en lo que sería conducta sexual ilegal o solicitar la producción de imágenes de pornografía infantil es ilegal y conlleva consecuencias serias”, indicó el jefe de la fiscalía federal en Puerto Rico, Stephen Muldrow, por escrito.
“Solicitar que un menor bajo la edad de 18 años envíe imágenes sexualmente explícitas es ilegal. Esté alerta y reporte esas actividades ilegales a las autoridades de ley”, agregó. “Procesar crímenes contra los niños es una alta prioridad y la misión Protege la Seguridad de la Niñez está enfocada en combatir esos crímenes y procesar a los depredadores de nuestros niños”, dijo.
Fue el 26 de abril de este año cuando varias personas en Twitter revelaron las conversaciones de Marrero Gerena con adolescentes. Algunas de las denuncias publicadas en las redes sociales aludían a peticiones que el empresario hacía a jóvenes para que accedieran a ser fotografiadas, entre otros acercamientos.
“El me escribió también y yo tengo 14 años!! al final le piche todos los mensajes que me enviaba pq sabia que algo no estaba bien... él seguía insistiendo y borró muchos de sus mensajes. Me preguntó que si vivía con mis papás osea???...”, indicaba parte de uno de los mensajes publicados en las redes sociales por una de las jóvenes que alega fue víctima de acoso.
En el mensaje, la joven establece que le dijo al hombre que era menor de edad y que este, supuestamente, le ofrecía una escapada con “yate, fotos, party, bebidas, playa, música, sexy fun”.
Otra denunciante indicó que fue a una fiesta de uno de los hombres señalados cuando tenía entre 16 y 17 años, en la que “había tanto alcohol gratis para menores de edad, obligao su intención era caerle bien a más nenitas de esas edad, que asco”.
En aquel momento, la gobernadora Wanda Vázquez solicitó a las autoridades investigar las denuncias de acoso sexual contra menores.
“HSI ve una creciente tendencia donde los niños están siendo tentados, engañados y coaccionados en Internet por adultos para que les produzcan para ellos material sexual explícito”, indicó Iván J. Arvelo, agente especial a cargo de ICE-HSI en Puerto Rico.
“Continuaremos priorizando los arrestos de depredadores de niños, pero no podemos salir de este problema solamente con arrestos: la educación es la clave para la prevención”, añadió.
Destacó que “este pliego acusatorio representa un fuerte golpe coordinado” contra “la pornografía infantil y aquellos que buscan ilegalmente hacerles daño a nuestros ciudadanos vulnerables, nuestros niños jóvenes”.
“Claramente, esta actividad criminal ha alcanzado proporciones epidémicas y ICE-HSI continuará colaborando aquí y y en otras jurisdicciones para identificar esos adultos que atrozmente violan a los niños de nuestras comunidades”, afirmó.
Para denunciar crímenes contra niños, la ciudadanía puede comunicarse con el Equipo de Trabajo federal de Crímenes contra la Niñez de Puerto Rico al (787) 729-6969. También, se puede comunicar con el Negociado Federal de Investigaciones (FBI) al (787) 987-6500.