Conoce cuál es el impacto del COVID-19 en los mercados de valores y planes de retiro
● Experta en el manejo de inversiones ofrece sus consejos sobre qué hacer con los planes de retiro 401 K y Keogh ante la realidad actual
El Covid-19 ha trastocado muchas cosas, inclusive los mercados de capital, donde ha surgido una bifurcación provocada por la digitalización, una tendencia que comenzó hace más de una década, pero que la pandemia ha acelerado exponencialmente.
“Hay unos sectores de los mercados de capital que han sido beneficiados por la crisis. Esa revolución industrial está ahí hace años, comenzó en los años 70, se aceleró en los 90 con la llegada del internet, y con el Covid se ha activado exponencialmente”, indicó Myrna Rivera, fundadora de la firma de consultoría en inversiones Consultiva Wealth Management, en referencia a la era digital, considerada la cuarta revolución industrial, después de la máquina de vapor (1698), la electricidad (1879) y la tecnología (1941).
“Con el Covid-19 estamos viviendo una vida que, si no fuera por este virus, la hubiéremos vivido tal vez en el 2025, pero no ahora”, dijo la experta en inversiones. Explicó que al estar en las casas, muchas actividades cotidianas se hacen en línea y los sectores que apoyan esa vida virtual han sido los beneficiados.
Como muestra de ello, basta con echarle un vistazo al S&P 500 -el índice bursátil más representativo de la situación real del mercado- para darse cuenta que el 80% de su capitalización hoy es representada por solo cuatro de los 11 sectores que la componen.
Estos sectores, que se caracterizan por adoptar la innovación, la tecnología y la digitalización, son: tecnología de información (IBM, Microsoft, Apple); Comunicaciones (Facebook, Twitter, Netflix); Consumo discrecional (Amazon, E-Bay, Home Depot, Best Buy); y Cuidado de salud (Johnson & Johnson, Amgen, Pfizer, Abbott).
Los sectores restantes, entre ellos la banca, bienes raíces, manufactura, construcción, utilidades y el sector de energía han resultado afectados. Por ejemplo, para la banca, en la medida que los negocios cierran y más gente se queda sin empleo, el riesgo del impago en los préstamos comerciales y personales crece.
En cuanto a las bienes raíces, hay malls en Estados Unidos que se están transformando en oficinas médicas, en viviendas y hasta en almacenes de Amazon. Y a nivel del mercado residencial también ha habido una transformación tras la pandemia, pues el valor de los apartamentos, digamos en Manhattan, Nueva York ha bajado, mientras casas en los suburbios han subido de precio. “Ha habido una transición de la vida urbana a una semi urbana para buscar calidad de vida y debido también al cambio en la forma de trabajar, cambio que para muchos será permanente”, sostuvo Rivera, al agregar que algo similar sucede en Puerto Rico.
DÓNDE INVERTIR
¿Significa esto que solo se debe invertir en los cuatro sectores beneficiados y no en los otros siete? preguntó este diario. Rivera contestó en la negativa. “La diversificación sigue siendo clave. No es el momento de salir corriendo, es momento de ser astuto. Dada la nueva realidad, hay que saber hacia dónde movemos el dinero”.
Aconsejó además no mover las inversiones a dinero en efectivo (“cash”). “No lo muevas a ‘cash’ porque te quita rendimiento y te robará poder adquisitivo. Dejar el dinero en ‘cash’ o en ‘money market’ no paga nada, la inflación te va comiendo el valor del dólar, y en términos reales, después tendrías menos dinero que ahora”.
La pregunta que muchos se hacen es qué va a pasar con sus inversiones en el plan 401k o en el Keogh si la economía está detenida y el desempleo ha subido.
“No hay un vehículo más importante de inversión para muchos de nosotros que somos empleados que un plan 401K. Nos da varias ventajas contributivas”, expresó. En el caso de los profesionales por cuenta propia ese vehículo son los planes Keogh.
En este momento, el primer paso es reevaluar cuándo la persona quiere jubilarse y cuántos años le faltan para ello. “Esa fecha es importante porque es cuando dejará de recibir un sueldo”, aunque Rivera aclaró que muchos optan por hacer otras cosas, como retomar otra carrera, un pasatiempo o regresar a la universidad.
Luego, con la orientación de un asesor en inversiones, debe determinar cuánto dinero necesitará a la fecha de jubilación para cumplir sus obligaciones y tener calidad de vida; así cómo qué fuentes de ingreso tendrá. “Los que tienen un porfolio de inversiones se preguntan ‘qué hago con el dinero hoy para que, de aquí allá, tenga el dinero que necesito’”.
En promedio, el rendimiento anual de las inversiones fluctúa entre 5.5% y 6.5%, y la meta debería ser comprar productos que le permitan obtener dicho rendimiento.
Para ello, hay que diversificar y Rivera sugiere tener un 60% en acciones y el restante 40% en diversos modos de renta fija, tales como bonos del Tesoro federal, bonos corporativos de alta y mediana calidad, acciones preferidas y carteras de bienes raíces. “En un plan típico 401K esas categorías existen a través de fondos mutuos”, manifestó.
En comunicación con el asesor en inversiones, y basado en la edad, la capacidad de ahorro y la aversión al riesgo, entre otros factores, puede determinar cuáles son los fondos en los que va a invertir. “En algunos planes, ya hay algunas opciones predeterminadas que son una alternativa sensata para muchos de los empleados”.
Además del COVID-19, hay otros factores que causan incertidumbre, entre ellas el resultado de las elecciones presidenciales y el no tener una vacuna todavía para combatir la pandemia. Todo ello ocasiona volatilidad en los mercados, pero no debe afectar al inversor.
“Es momento de ser astuto. Dada la nueva realidad, hay que saber hacia dónde movemos el dinero”
MYRNA RIVERA
A PUNTO DE JUBILARSE
“Los mercados son prospectivos, hay volatilidad por la incertidumbre. Pero si eres un inversor a largo plazo, a cinco años o más no debe preocuparse”, manifestó la experta.
Aclaró que aún los que están próximos a la edad de jubilación, no deben afectarse, pues el jubilarse no significa que hay que sacar el dinero del plan. De hecho, Rivera aconseja no retirarlo, pues tendrían que tributar por ese dinero y evaluar qué harían con ese dinero.
Lo conveniente es ir retirando cantidades de dinero, según las necesite.
“No hay que sacar el dinero al momento de la jubilación. Ese plan seguirá invirtiéndose, se transforman los pesos entre las inversiones, primero era un plan de acumulación y ahora de ingresos. Es una canasta que te va a acompañar hasta los 95 años”, manifestó la experta.