“Estoy esperando el consenso”
El senador Charles Schumer indicó que, tras el referéndum en Puerto Rico, considera que sigue la división en torno al futuro político de la isla
WASHINGTON.– El líder demócrata del Senado, Charles Schumer (Nueva York), advirtió que se requiere un “fuerte consenso” en Puerto Rico para poder avanzar, en la capital federal, una propuesta a favor de la estadidad para la isla.
En sus primeras declaraciones sobre el resultado del referéndum “sí” o “no” del 3 de noviembre, en el que la estadidad obtuvo el 52% de los votos, Schumer indicó a El Nuevo Día que el debate sobre el status político de Puerto Rico refleja que la isla está dividida sobre ese asunto.
Y dijo entender tanto las denuncias sobre el status territorial como los reclamos en favor de que se eche a andar un proceso “justo”.
Schumer continuará, en enero, como líder demócrata del Senado.
En momentos en que los republicanos han asegurado 50 de los 100 escaños del Senado, no será hasta el 5 de enero, cuando se llevarán a cabo dos segundas vueltas en Georgia, que se conocerá si Schumer será el líder de la mayoría -contando con el voto de la vicepresidenta electa, Kamala Harris-, o seguirá en minoría.
Después del actual líder de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell (Kentucky) haber hecho claro que jamás dará paso a una propuesta de estadidad para Puerto Rico o Washington D.C., las expresiones de Schumer acentúan cuán cuesta arriba es el interés del Partido Nuevo Progresista (PNP) en convencer al Congreso de que los resultados de la consulta del mes pasado ameritan la admisión de la isla a la Unión o una oferta de estadidad.
Antes de las elecciones, usted dijo que apoyaría que Puerto Rico fuera un estado, si Puerto Rico lo pedía. Hubo un voto en noviembre. El Departamento de Justicia de Estados Unidos indicó que
no cumplió con la política pública del gobierno federal, pero el 52% de los electores apoyó la estadidad ¿Qué hará ahora como líder demócrata del Senado, en mayoría o minoría?
—Los puertorriqueños son los que deben decidir el status político de la isla y el Congreso debe respetar la voluntad de la gente. Estoy escuchando de líderes de todo Puerto Rico, en Nueva York y en la isla, y no hay aún consenso, hay división. Estoy esperando porque ocurra ese consenso. No debo imponer mis puntos de vista, sino esperar porque evolucione un consenso. Y eso es todo lo que digo sobre la estadidad. Si hay un fuerte consenso, lo seguiré en cualquier dirección que tome.
¿Claramente, 52% no es un consenso?
—Entiendo que la gente que quiere la estadidad dice que “Estados Unidos no nos trata justamente”. Ahora, también entiendo a la gente que dice que tiene que haber un proceso justo y pleno. Estoy esperando porque se desarrolle el consenso.
Usted recomendó a Betty Rosa, comisionada interina de Educación en Nueva
York, a la Junta de Supervisión Fiscal. Hay gente que piensa que se debe abolir Promesa o, al menos, suavizarla.
—Bajo el liderato de Mitch McConnell, Promesa ha seguido la voluntad de los bonistas, no del pueblo de Puerto Rico. Objeto eso vehementemente. Betty Rosa va a ser una buena adición a la Junta. Ella entiende la educación, es una maestra y entiende que el trabajo de la Junta no es servir a los acreedores, sino a la gente. Bajo la administración de Biden y conmigo como líder de la mayoría, tendremos una reforma dramática de la Junta, para que siga la voluntad de la gente. Estoy molesto, decepcionado e incluso enojado por la forma en que Promesa está funcionando.
Usted y la congresista Nydia Velázquez reclamaron a FEMA precisar que no habrá restricciones para promover energía limpia y microrredes como parte de la inversión federal en el sistema eléctrico de la isla ¿Recibió respuesta?
—FEMA ha sido terrible para Puerto Rico. No ha hecho lo que es necesario para Puerto Rico. Tenemos que hacerlo. La administración de (Joe) Biden hará una gran diferencia. Me aseguraré, debido a que el líder de la mayoría o de la minoría de Senado tienen mucho que ver con quien es confirmado, que cualquiera que sea puesto a cargo de FEMA le dará a Puerto Rico el dinero que no solo (Donald) Trump frenó, sino el dinero que Puerto Rico necesita en el futuro y al que tiene derecho, no solo para recuperarse del huracán María. Necesitamos un nuevo sistema eléctrico “verde”. Puerto Rico se merece ser llevado al siglo 21 con una infraestructura moderna, verde… y limpiar el canal (del caño Martín Peña) en el medio de San Juan. Debe haber dinero para limpiarlo. Vamos a pelear duro por eso cuando Biden sea el presidente.
Hay un debate en favor de volver a incentivar la inversión manufacturera en Puerto Rico. ¿Ha estudiado alguna propuesta específica que beneficie a la isla o cualquier propuesta debe beneficiar a todas las jurisdicciones federales por igual?
—El COVID-19 ha hecho muchas cosas malas, horribles. Ha creado la peor crisis económica desde la depresión (de la década de 1930), la peor crisis de salud desde la influenza española. Pero hay un par de cosas de las que podamos sacar ventaja. Una de esas es demuestra que necesitamos una cadena doméstica para nuestra industria farmacéutica. Puerto Rico siempre ha tenido un papel importante en eso. Ese rol se ha disminuido un poco con los cambios en las leyes contributivas. Pienso que debemos, especialmente bajo una nueva administración, utilizar la necesidad de una cadena doméstica de suministro para las farmacéuticas y los medicamentos que el COVID ha demostrado que necesitamos, para fortalecerlo e incentivar que haya mucha más de la industria farmacéutica en Puerto Rico… No estoy en contra de que haya algo que ayude a la isla específicamente.
La Cámara baja aprobó en esta sesión muchos fondos para Puerto Rico que nunca tuvieron el visto bueno del Senado, incluidos los créditos contributivos por ingresos devengados (EITC) y por niños dependientes (CTC). ¿Los apoyaría?
—Con un presidente demócrata, aunque no tengamos la mayoría en el Senado, tendremos más capacidad. (Biden) presentará la legislación y batallaremos para lograrlo. No tengan duda de que Mitch McConnell y los republicanos no han sido amigos de Puerto Rico, en nada.