ADRIANA DÍAZ
La pequeña gigante de Utuado comenzó el 2020 con la conquista de su segunda Copa Panamericana consecutiva en el mismo escenario de 2019: el coliseo Mario “Quijote” Morales de Guaynabo. El evento deportivo fue uno de los últimos celebrados con público en las gradas debido a que un mes después entró en vigor la primera orden ejecutiva del gobierno que prohibió la celebración de actividades multitudinarias.
Sin conocer lo que pasaría más adelante, Díaz no defraudó a los miles de fanáticos que llegaron a la instalación para gozar de sus destrezas con la raqueta. La joven, de 19 años en aquel entones, dominó a su antojo a cada una de sus rivales, robándose suspiros de los presentes con su juego, hasta subir a lo más alto del podio.La cargada agente de la tenimesista se detuvo por la pandemia. Con tiempo libre fuera de sus prácticas, Díaz se matriculó para cursar su primer año de universidad (en línea). En octubre, Díaz regresó a China junto a su padre y entrenador Bladimir, y su hermana Melanie, para la reanudación del circuito de la Federación Internacional de Tenis de Mesa. Como la raqueta número 19 del mundo, terminó entre las mejores 16 jugadoras en la Copa del Mundo en Weihai y debutó en el prestigioso torneo de la Gran Final de la ITTF en la ciudad de Zhengzhou, jugando junto a siete de las 10 mejores competidoras del planeta.
Su gran desempeño en la meca del tenis de mesa extendió su estadía en el gigante asiático para estrenarse en la Superliga de China, convirtiéndose en la primera latinoamericana en jugar en el reconocido certamen. Díaz despedirá el 2020 en el oriente y permanecerá en el país hasta finales de febrero después de recibir una invitación para entrenar con la selección de este país. Al momento, figura en la posición 18 , su punto más alto en el ranking.