VOZ resonante del feminismo
El retiro del trabajo asalariado en la cátedra no ha tenido eco en su lucha por la equidad y defensa de los derechos de las mujeres, pues María Dolores Fernós sigue laborando desde diversas entidades tan activamente como antes
Reconocida por su trayectoria en defensa de los derechos de las mujeres, María Dolores “Tati” Fernós fue una de las voces que aplaudió la recién emitida orden ejecutiva que declara un estado de emergencia por violencia de género.
Luego de años de lucha por parte de organizaciones feministas que han reclamado acción contra ese problema social, que ha cobrado tantas muertes y provocado tantos traumas y desdicha, la medida finalmente “reconoce la existencia de una violencia por razón de género dirigida específicamente contra las mujeres y la comunidad trans”, escribió recientemente, en una columna de opinión, la exprocuradora de las Mujeres.
Destacó que la orden no solo reconoce la existencia del problema que afecta a mujeres de todas las edades, sino que propone medidas específicas para atenderlo.
En la propuesta, que aún habrá que ver cómo se materializa, la abogada y profesora universitaria retirada encontró respuesta a muchos de los reclamos que ha levantado por décadas desde diferentes foros y organizaciones junto con muchas otras mujeres.
A sus 74 años, Fernós recuerda que su lucha por la equidad nació en el seno de su hogar, donde se crio con dos hermanos a los que su madre les daba más libertad y les exigía menos participación en los quehaceres del hogar. “Me exigía hacer labores domésticas, pero no a mis hermanos y eso me reventaba, no podía ir tan lejos en la bicicleta como mis hermanos (por ejemplo). Creo que ese fue mi primer choque con la diferencia y el trato discriminatorio. Creo que a mí siempre me han molestado las injusticias; la pobreza me golpea, me ofende. Yo soy feminista por la misma razón que combato la injusticia de la pobreza, el colonialismo, y rechazo el racismo”, afirma.
De ahí su lucha por la igualdad y defensa de las mujeres en diversas organizaciones feministas, desde su cátedra en la Escuela de Derecho de la Universidad Interamericana y su dirección de la Clínica Legal de esa institución, hasta la Procuraduría de las Mujeres y, nuevamente, al finalizar en el servicio público, en el salón de clases.
MIENTRAS TENGA VOZ
De su función académica se retiró hace unos cinco años, mas no de la defensa de sus postulados. Fernós continúa siendo parte del grupo InterMujeres, el Instituto de Estudios sobre Mujeres, Género y Derecho que creó junto con otras tres profesoras feministas: Esther Vicente, Yanira Reyes Gil y Marilucy González Báez.
“Yo soy feminista por la misma razón que combato la injusticia de la pobreza, el colonialismo, y rechazo el racismo”
MARÍA DOLORES “TATI” FERNÓS
ABOGADA, PROFESORA RETIRADA Y EXPROCURADORA DE LAS MUJERES
Más recientemente, se les unió Patricia
Otón Olivieri.
La organización se fundó para educar, investigar y publicar trabajos dirigidos a “desmontar las condiciones que sostienen la desigualdad y la violencia contra mujeres y niñas, la violación de sus derechos humanos, así como la imposición de concepciones de género que mantienen la exclusión y la discriminación”, según su página digital.
La idea era que fuera como “un think tank de resonancia de los problemas” de desigualdad de las mujeres y niñas y que pudieran participar del debate público y la discusión y promoción de legislación pertinente al tema, señala Fernós.
El grupo hizo un primer estudio sobre la violencia en las relaciones de noviazgo de los jóvenes, que pretendía ser base para legislación, pero no tuvo respuesta en la Casa de las Leyes. Posteriormente, la organización Oxfam las contactó para hacer un proyecto sobre el impacto que tuvo el huracán María en las mujeres, proyecto que finalizó con la publicación del libro Voces de Mujeres: Estrategias de Supervivencia después de los huracanes
Irma y María. Y ahora, trabajan en el análisis de una consulta que se realizó de manera de digital para entender cómo la pandemia de COVID-19 ha afectado a las mujeres. El cuestionario, que fue respondido por más de 1,000 féminas, servirá para delinear un perfil de ese grupo, anticipa la letrada.
Justo antes de que se declarara el cierre por motivos de la pandemia del coronavirus, Fernós también fue parte del grupo que estableció la Fundación de Mujeres en Puerto Rico, con la ayuda de la New York Women Foundation, integrada por puertorriqueñas de la diáspora.
“Ellas entendieron que se necesitaba una organización para apoyar a las organizaciones de mujeres” en Puerto Rico y otorgaron unos fondos iniciales, que se han complementado con el apoyo de otras entidades que el grupo ha gestionado.
A pesar de la limitación que ha supuesto la pandemia, “hemos repartido fondos como a 18 organizaciones, aunque no son
grants grandes, y tenemos otras propuestas enviadas (para recaudar fondos) y desarrollamos nuestro plan estratégico”, cuenta Fernós, a quien acompañan en ese esfuerzo otras reconocidas figuras como
Sara Benítez, Marta Elsa Fernández, Mariluz Franco y Digna Sánchez.
“En otro esfuerzo que participo es Proyecto 85, que busca estudiar la baja participación de las mujeres en los puestos electivos. Se creó por unas jóvenes puertorriqueñas que, en su mayoría, han estado en Estados Unidos y han trabajado en el área de política pública. Me presentaron su proyecto y me fascinó. Fue una de las cosas que intenté hacer desde la Procuraduría”, dice la abogada, quien comenzó siendo miembro de la junta directiva de la organización y ahora la preside.
“Estuvieron muy activas en la prensa en estas elecciones, dieron muchos talleres de cómo hacer una campaña como a 600 mujeres, aunque no todas concretaron sus candidaturas”, explica. “Ahora tienen un proyecto para entrevistar y ver cómo les fue en la campaña, los obstáculos, los apoyos, las recomendaciones, con el fin de hacer estrategias efectivas para el proyecto eleccionario”, abunda sobre la entidad, cuyo nombre hace referencia al 50% de los puestos electivos en el país. En su ocupada agenda de labor social post retiro, Fernós también dedica tiempo a Fundación Comunitaria de Puerto Rico, a la cual pertenece desde 2010.
“Es bien interesante estar en esa junta, especialmente después de (el huracán) María porque las fundaciones norteamericanas, al conocer su labor, nos respaldaron financieramente y eso nos permitió apoyar proyectos como acueductos comunitarios y red de electricidad alterna. Y tratamos de introducir el tema de equidad de género porque sabemos que las mujeres no siempre están en los cuerpos directivos cuando las comunidades se organizan”, declara.
“Para mí, estos últimos años han sido cruciales en el trabajo que ha podido hacer Fundación Comunitaria y la incorporación de la equidad de género, que logramos que se enfocara como uno de los puntos (a trabajar) de la institución”, destaca.
Sobre la etapa de vida en la que está y las aportaciones que continúa haciendo, Fernós afirma que, “aunque estoy retirada del salón de clases, hago lo que me gusta. Estoy contenta porque veo un adelanto y unos cambios, aunque todavía falta en cantidad”.