Respuestas claras a preguntas sobre LUMA
He dicho, y reitero, que estatus político es uno de los asuntos que divide a nuestra isla, sino no el más. Confío en que solucionarlo aplaque las divisiones. Sin embargo, recientemente otro tema también ha segmentado a Puerto Rico. Ha dividido a los que apoyan la determinación de que a partir del próximo 1 de junio los servicios de transmisión y distribución de energía eléctrica estén en manos de la compañía LUMA, y los que se oponen a ello.
Por mi experiencia profesional, favorezco que servicios provistos de ordinario por el gobierno sean suministrados por la empresa privada. Esa fue mi experiencia con las instituciones correccionales “privatizadas” mientras fungí como secretaria de Corrección y Rehabilitación. La experiencia colectiva con la administración privada del aeropuerto internacional, y de las principales vías de tránsito, me lleva también a esa conclusión.
Pero el fracaso de años del servicio en manos del gobierno, y la eventual delegación de la administración de esos servicios a manos privadas, hacen más importante y necesaria la fiscalización.
Con relación a LUMA, la respuesta de la Autoridad de Energía Eléctrica, ante los retos causados por el huracán María, es muestra adicional de que urge solucionar el estado de los servicios de la corporación. Como es conocido, es una locura intentar obtener resultados diferentes haciendo lo mismo. Pero, con ese argumento, y tomando en la respuesta ante los retos derivados del huracán María, muchos servicios de otras agencias públicas deberían entregarse a empresas privadas.
Para propósitos de esta discusión, asumamos que lo correcto es que LUMA se encargue de la transmisión y distribución energética. De hecho, muchos creemos que, en efecto, es lo correcto. Pero la pregunta que muchos hacemos es si el primero de junio es la fecha correcta para que los servicios pasen de la AEE a LUMA. Muchos de los que no hacen ese cuestionamiento, incluido el gobernador Pedro Pierluisi, han argumentado que cambiar la fecha no es alternativa, particularmente porque habría que pagar, tanto los servicios de la AEE como a LUMA.
Reportes noticiosos consignan que esta temporada de huracanes será más activa de lo normal desde su inicio. Es posible que al 1 de junio la temporada ya haya comenzado. ¿Estaría LUMA lista para enfrentarla? Se ha argumentado que el conglomerado LUMA tiene la experiencia necesaria para estarlo. Sin embargo, ¿con cuántos empleados contará? Se estima que ahora alrededor de 4,300 empleados de la AEE se encargan de los dos servicios que LUMA tendría a su cargo. A pesar de que la compañía alega que ya ha contratado entre 1,000 y 1,500 empleados de la corporación, otros sectores alegan que las contrataciones son menos de 500.
Al final, algunos pudieran pensar que, al margen del asunto de la nómina, la transición a LUMA debe darse en la fecha acordada. Yo insisto en que no hay que conocer mucho de administración pública para saber que es más probable obtener resultados positivos cuando las preguntas tienen respuestas claras y el momento de actuar es el correcto. En este caso, existen preguntas sin contestar y poco tiempo para aclararlas. Lo importante es que la decisión beneficie a Puerto Rico. El tiempo dirá si el primero de junio es el momento correcto.
Es más probable obtener resultados positivos cuando las preguntas tienen respuestas claras y el momento de actuar es el correcto. En este caso, existen preguntas sin contestar y poco tiempo para aclararlas”