Hay otros “muros de Berlín” que deben ser derribados
“La libertad tiene muchas dificultades y la democracia no es perfecta, pero nosotros nunca hemos tenido que poner un muro para mantener a nuestras personas dentro”. Esto lo dijo el presidente John F. Kennedy cuando la Alemania comunista construyó el Muro de Berlín el 13 de agosto de 1961.
Finalmente se derrumbó el muro en 1989. En ambas Alemanias se respira libertad. Un mismo país ya no está dividido en dos por las tensiones entre soviéticos y estadounidenses.
José Daniel Ortega Saavedra completó su primer término presidencial, de nueve años, en 1990, pero retomó la presidencia de Nicaragua el 10 de enero de 2007. Como líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional sigue en el puesto hasta el presente.
Hugo Rafael Chávez Frías fue presidente de la República Bolivariana de Venezuela desde el 2 de febrero de 1999 hasta su fallecimiento, en 2013. Nicolás Maduro Moros lo sucedió en el poder al que se aferra actualmente.
Fidel Alejandro Castro Ruz fue un militar que lideró la Revolución cubana y triunfó el 1 de enero de 1959, derrocando a la dictadura de Fulgencio Batista. Fidel mantuvo el poder desde 1965 hasta 2011, cuando lo transfirió a su hermano Raúl. Sin embargo, su gobierno anacrónico continúa hoy con Miguel Díaz Canel.
El Partido Comunista es el único. “La infracción de este principio es punible”. Por lo tanto, no puede haber oposición ni cambios en Cuba según la Constitución. Eso no puede continuar. El pueblo cubano, el venezolano, el nicaragüense y todos los pueblos necesitan libertad e igualdad.
Ortega, Trump, los Castro, Díaz Canel y Maduro, que tanto hemos censurado, tienen actitudes similares. Ellos no aceptan los resultados de las elecciones si pierden. Atacaron a la prensa, a los inmigrantes y a la oposición. Pronuncian discursos kilométricos llenos de mentiras, alaban a otros dictadores, separaron a niños de sus padres y pretendieron o procuran gobernar sin límites.
Estos líderes llegaron al poder con apoyo del pueblo, pero irónicamente se convirtieron en los dictadores que tanto criticaron y combatieron. Convirtiendo en eterna la dictadura del proletariado.
Es necesario que en todos los países se siga luchando a favor de la igualdad, tolerancia y contra el discrimen.
Es hora ya de que haya una reconciliación entre los exiliados y los de Cuba. Que el régimen anacrónico de Cuba cambie y también la política de Estados Unidos a ese país. Eliminar el anticuado e inútil bloqueo. Nuevos muros de Berlín a derribar por los sometidos, por los que padecen persecución religiosa, cultural, social. Por los que son incapaces de entender que solo la democracia, la libertad y los derechos humanos son lo que permiten a una sociedad avanzar y superar las cadenas del atraso.
Félix Daniel Torres, San Juan