Malestar con la gestión de la Asociación
Jugadores reclaman públicamente una mejor representación del gremio en varios asuntos ante la junta del BSN
Un grupo de jugadores del Baloncesto Superior Nacional (BSN), encabezado por el armador de los Vaqueros de Bayamón, Ángel Rodríguez, no está complacido con la representación actual de la Asociación de Jugadores, presidida por el licenciado Ricardo Carrillo, debido a la permanencia de la regla del “Jugador Franquicia” y el tema del tope salarial.
Además de Rodríguez, otros jugadores que no lucen satisfechos con la labor del gremio son Gian Clavell y Jared Ruiz, quienes hablaron con este medio.
“No voy a decir que no se está haciendo un buen trabajo, pero no estamos contentos. Queremos ver un cambio que favorezca a los jugadores, que podamos escoger dónde queremos jugar”, dijo Clavell, escolta de los Cangrejeros de Santurce, a El Nuevo Día sobre la Asociación.
Rodríguez ha sido el líder del movimiento en contra de la cláusula “Jugador Franquicia”, luego de expresar públicamente, a través de las redes sociales, su descontento por el caso del veterano alero Alex Franklin con los Brujos de Guayama. Esta cláusula establece que una franquicia puede reservar dos veces consecutivas a un canastero que sea elegible a la agencia libre y haya promediado 20 minutos o más por juego en su última temporada.
En el caso de Franklin, el alero fue reservado -bajo los términos de esta cláusula- por los Brujos, siendo el quinto año al hilo que le sucedía, ya que también había sido reservado por San Germán y Quebradillas. El jugador no llegó a un acuerdo con Guayama y la Asociación llevó el caso a la liga para conseguirle la agencia libre. Pero el pleito no prosperó una vez Franklin fue cambiado a los Gigantes de Carolina, donde estampó su firma.
Para Rodríguez, este es un proceso que se pudo evitar si la Asociación hubiera pedido un cambio en el reglamento en el pasado. “No es un secreto. Esto se supone que hubiese sido resuelto hace tiempo. Des afortunadamente, los que están a cargo ahora en representarnos como jugadores, porXoY razón( no lo hicieron ). Note puedo dar la razón porque no estuve en ninguna de esas reuniones”, expresó Rodríguez, quien debutó en el BSN en 2018.
“Es algo que la Asociación de Jugadores se hubiese encargado de bregar sin nosotros tener que llegar al punto que tuvimos que hacer lo que hicimos en el Juego de Estrellas y lo que resta por hacer”.
Antes de comenzar el Juego de Estrellas el pasado 28 de mayo, todos los jugadores participantes vistieron camisetas negras con mensajes que leían “Queremos libertad” y “#BSNAgencialibre”.
Rodríguez no fue directo en decir si quiere un cambio en la silla que ocupa Carrillo desde enero 2020. Carrillo sustituyó al armador de los Leones de Ponce, Carlos Rivera, quien se retira este año. La directiva está compuesta por Filiberto Rivera (armador de Santurce), junto a Andrés Torres y Miguel Alí Berdiel.
“Creo que es necesario que todo jugador tenga una opción a un voto y decidir si continuamos con él o si nos movemos a otra dirección. Es una de las prioridades, definitivamente, porque aquí todo el mundo tiene una voz”, señaló Rodríguez, quien no descartaría un puesto en el gremio.
Ruiz, escolta de los Indios de Mayagüez y quien será agente libre el año que viene, estuvo de acuerdo con Rodríguez sobre la falta de acción de la Asociación.
“Si nadie pelea por nuestros derechos, ¿quién lo va a hacer? Carrillo lo está haciendo ahora pero esto no pasaba sin Ángel. ¿Dime qué ha cambiado, qué han podido cambiar? Ahora viene el alza escalonada (en el tope salarial). (Carrillo) lleva dos años en la Asociación, y se está moviendo ahora. ¿Qué ha peleado y qué ha ganado? No conozco mucho porque no llevo mucho, pero dime qué ha hecho”, cuestionó Ruiz, activo desde 2015.
DESCONTENTO CON EL TOPE
Para 2016, la Asociación de Jugadores, presidida por Rivera, consiguió recuperar una silla en la junta de directores del BSN. En aquel entonces, el tope salarial individual para los baloncelistas nativos era de $80,000, cuando anteriormente había sido de $120,000. Pero debido a los daños causados por el huracán María, el tope fue rebajado hasta $40,000.
Antes de comenzar el presente torneo, la Asociación logró un acuerdo para un aumento escalonado en el tope salarial desde el 2023 al 2025, arribando a los $50,000.
Para el grupo, el aumento es mínimo al ver el poder económico que ha entrado en el torneo en los últimos dos años con apoderados como Yadier Molina (Bayamón), Frabián Eli (Arecibo), y el grupo de Rimas Music Entertainment (Santurce).
“Ya pasaron los huracanes y terremotos. No entendemos por qué sigue siendo $40,000 si no tenemos los números (ganancias de los equipos). Vimos la cifra (del nuevo tope). Es un chiste. No sé ni para qué hicieron eso. Lo que vemos no va a la par con el tope salarial”, planteó Rodríguez.
CARRILLO RESPONDE
Carrillo, por su parte, declaró que en las últimas dos reuniones de la junta de directores se llevó a votación una enmienda para eliminar la cláusula de “Jugador Franquicia” y en ambas ocasiones fue derrotada por los apoderados. La Asociación tiene un voto junto a las 12 franquicias.
Sobre el malestar del grupo, Carillo indicó que no ha recibido quejas por parte de los canasteros. De existir un consenso para su salida, abandona el puesto de inmediato, el cual vence ahora a finales de 2022 (tres años).
“No hemos tenido ningún tipo de mensaje de ningún jugador con referencia a que tengan algún tipo de malestar con la representación de la Asociación. En segundo lugar, todos los jugadores que se han acercado a la Asociación, todos han sido atendidos, sus reclamaciones ante la liga y apoderados”, reaccionó.
“En tercer lugar, mi posición está a disposición inmediata de aquellos que entiendan no ha sido satisfactoria. Mañana mismo (dimito)”, dijo Carrillo.