EMPRESA PUERTORRIQUEÑA recibe premio internacional
La compañía Amasar fue reconocida con el Sofi Award el más prestigioso de la industria de la gastronomía
La compañía puertorriqueña Amasar, dedicada a la creación de varios productos confeccionados teniendo como ingrediente principal la pana, fue reconocida el domingo con un Sofi Award, en la categoría de mejor producto de desayuno con su harina de pana para “pancakes” y “waffles”.
“Esto se considera el Oscar de la comida gourmet en la cocina internacional. Es importante entender el valor del premio para darle la importancia que merece. Puerto Rico nunca había ganado este premio”, expresó emocionada Marisol Villalobos Rivera, quien junto a su esposo Jesús Martes Cordero, fundó Amasar en el 2016.
El Sofi Award es un reconocimiento que desde hace 50 años realiza la Specialty Food Association. Los merecedores de este galardón se seleccionan mediante un proceso de cata a ciegas y lo que se busca es que los ganadores sean productos innovadores en sus categorías.
Según como se describe en la página de internet de Specialty Food Association: “el premio Sofi trae consigo la exposición a los compradores de alimentos de los principales nombres de los supermercados, minoristas especializados, servicio de alimentos, distribuidores, así como la prensa. Ganar un premio Sofi no es solo otro trofeo para su estantería, es una puerta a invaluables oportunidades comerciales y reconocimiento mundial”.
Esta es la primera vez en medio siglo de concurso que un producto puertorriqueño aparece en la lista de ganadores, lo que para Villalobos Rivera representa, no solo un logro para su empresa, sino un gran orgullo para la isla.
“Solicité gracias a Anthony Cardona, un servidor público del Departamento de Desarrollo Económico, que nos escribió un email diciéndonos que teníamos la posibilidad de participar. Tener un negocio requiere mucho tiempo y te impone muchas tareas y responsabilidades, pero ese email me trabajó y fuera de las horas de trabajo diario fui completando la aplicación. Fue algo que tomó varios días. No fue fácil porque pedían mucha información, pero lo hice y enviamos las 15 muestras a Estados Unidos para completar el proceso”, recuerda Villalobos Rivera.
Para participar, las muestras se envían al Centro de Innovación de Alimentos de la Universidad de Rutgers en Bridgeton, Nueva Jersey. Allí se encargan de reunir a un jurado que incluye reconocidos chefs, instructores culinarios, desarrolladores de recetas, periodistas gastronómicos y compradores de alimentos especiales.
“Ese jurado experto evalúa sabor, textura, olor, valor nutricional, calidad de los ingredientes y la innovación. Los jueces lo primero que hacen es probar, van a la segunda etapa para evaluar la tabla nutricional, luego conocen los ingredientes y finalmente es que ven el empaque. Es una prueba a ciegas que no tiene otra influencia salvo el sabor y lo que van aprendiendo del producto según va avanzando la evaluación”, explica Villalobos Rivera, microbióloga industrial.
El pasado fin de semana Villalobos Rivera y Martes Cordero viajaron a Nueva York a recibir el premio y también a participar en una exposición de los productos ganadores. Junto al exhibidor de Puerto Rico, se presentaron alimentos de diversas partes del mundo.
“No se trata de un premio monetario, sino que es un premio de mercadeo y exposición. Tengo fe que gracias a este evento vamos a encontrar al menos una oportunidad de exportar a la nación americana... Estamos ganando en una categoría super competitiva y esto que está pasando es un ejemplo de todo lo que los puertorriqueños podemos lograr”, añade Villalobos Rivera.
Amasar fue fundada en el 2016, aunque lanzó su primer producto en 2018.
Actualmente, la empresa boricua tiene cuatro productos en el mercado basados en la pana: la harina multiusos, la mezcla de pancakes, y dos cremas de desayuno, que se consiguen en los principales supermercados y a través de amasar.net.
La finca ubicada en Jayuya está sembrada de forma agroforestal, opera con energía renovable, recogido de agua de lluvia para el riego y cuenta con zanjas al contorno para evitar la erosión del suelo.