Miguel Cotto, inmortal y orgullo de Puerto Rico
La exaltación de Miguel Cotto Vázquez al Salón de la Fama del Boxeo Internacional en Canastota, Nueva York, el pasado domingo reafirma al exboxeador cagüeño como uno de los mejores atletas que ha dado Puerto Rico. Eso es motivo de celebración para toda la isla.
Persona de pocas palabras, Cotto siempre dejó que sus acciones en el cuadrilátero hablaran por él. Y sobre el “ring”, fue uno de los mejores en la historia. Cotto es el único boxeador en la historia de Puerto Rico en conquistar campeonatos en cuatro pesos distintos: 140, 147, 154 y 160 libras. En un país con tanta historia boxística, y grandes campeones, lo logrado por Cotto no es gesta pequeña. Su récord de 41-6 con 33 victorias por la vía del nocaut quizás no impresiona cuando se compara con otros grandes campeones históricos, pero nuestro púgil nunca les huyó a los grandes campeones de su época.
Todo lo contrario: Cotto siempre se enfrentó a la mejor competencia posible, con resultados mixtos. Por ejemplo, en 2012, midió fuerzas con el estadounidense Floyd Mayweather, quien terminó su carrera invicto, pero siempre señaló al puertorriqueño como uno de sus rivales más difíciles en el cuadrilátero tras una pelea que duró 12 asaltos.
Cotto fue protagonista de grandes noches para Puerto Rico, tomando el batón de Félix “Tito” Trinidad. Sus combates contra Shane Mosley, Antonio Margarito (dos veces), Saúl “Canelo” Álvarez, Mayweather y Sergio “Maravilla” Martínez, por mencionar algunos, generaron gran expectación en Puerto Rico, un país conocedor del boxeo como pocos otros. Tal como hizo Tito Trinidad, Miguel Cotto fue también capaz de reunir a familias y amistades para ver sus peleas. Pocos deportes levantan más pasión entre la fanaticada de nuestra isla que el boxeo, y eso se demostraba cada vez que Cotto subía al cuadrilátero.
Durante su carrera boxística, Cotto también estableció fuertes lazos con la diáspora puertorriqueña, que llenaba todas sus carteleras en el Madison Square Garden de la ciudad de Nueva York, considerada la meca del boxeo. Así se evidenció el pasado fin de semana, cuando la bandera puertorriqueña ondeó en Canastota gracias a los fanáticos boricuas que se trasladaron allá. Como si fuera poco, la gerencia del Madison Square Garden también le rindió homenaje a Cotto, entregándole una llave simbólica de la considerada arena más famosa del mundo. Eso, también, es motivo de orgullo para nosotros como pueblo.
Fuera del cuadrilátero, Cotto ha demostrado tener una gran mente para negocios e invertir su dinero, algo que siempre agradeció a su fenecido padre. Actualmente, trabaja en el desarrollo de boxeadores a través de su compañía promotora Miguel Cotto Promotions, que se ha establecido como una de las principales en la isla. Igualmente, está incursionando con esta compañía en República Dominicana, donde recluta talento.
Todo esto se dio luego de que Cotto incursionara en el boxeo de muy joven para intentar bajar de peso. De hecho, en el lado filantrópico, Miguel creó la Fundación El Ángel, cuyo norte es combatir la obesidad infantil. Esas ganas de reducir el peso lo llevaron a una carrera aficionada que lo condujo a ser abanderado de la delegación de Puerto Rico en los Juegos Panamericanos de Winnipeg 1999 y a participar en los Juegos Olímpicos de Sydney 2020. Todo eso abrió la puerta a la carrera profesional que iniciaría en 2001, y que lo convertiría en el puertorriqueño número 13 en ser exaltado en Canastota.
Estamos seguros de que Cotto, ahora como inmortal del cuadrilátero, continuará aportando al boxeo y al deporte puertorriqueño, algo que será ganancia para el país, en especial la juventud.