Aprobada la resolución en la ONU
La jornada incluyó la presentación de más de 40 ponentes ante el Comité de Descolonización y una manifestación a favor de la independencia
NUEVA YORK.- Después de escuchar a más de 40 ponentes, el Comité de Descolonización de la Organización de las Naciones Unidas ( ONU) aprobó ayer –por consenso y cuadragésima ocasión– la resolución que reconoce el derecho de Puerto Rico a su libre determinación e independencia.
La votación marcó el 50 aniversario de los debates sobre el caso político de Puerto Rico en el Comité de Descolonización, que sigue sin poder avanzar a la Asamblea General de la ONU. La jornada terminó con una manifestación en una plaza aledaña a la sede de la Organización, que reunió a decenas de independentistas e incluyó a varios de los que testificaron.
Aunque el tema no está en la agenda del Senado de Estados Unidos, donde se ha descartado aprobar un proyecto proestadidad, la sesión coincidió con esfuerzos del liderato demócrata de la Cámara baja en busca de un acuerdo sobre una medida que convoque a un plebiscito federal vinculante entre la estadidad, la independencia y la libre asociación, excluyendo el status territorial o colonial vigente.
Pedro Luis Pedroso, embajador cubano ante la ONU y quien presentó la resolución adoptada por el Comité de Descolonización, afirmó que el caso colonial de Puerto Rico “no es un asunto interno de Estados Unidos”. “Incumbe al Comité de Descolonización y toda la comunidad internacional”, sostuvo Pedroso, quien subrayó que el propio Tribunal Supremo y Congreso estadounidenses se han encargado de quitarle el “disfraz” colonial a la isla.
Como ha ocurrido en años recientes, la resolución fue coauspiciada por Venezuela, Nicaragua, Bolivia, Siria, Rusia y Antigua y Barbuda. También, hubo expresiones de respaldo de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), a cargo de la representación de Argentina, y del Movimiento de Países no Alineados, representado por Azerbaiyán. “La CELAC reafirma la identidad caribeña y latinoamericana de Puerto Rico”, dijo la representante de Argentina.
“(Puerto Rico), con quien nos unen profundos lazos de amistad, historia y cultura, (es) la única causa de dominación colonial pendiente en todo nuestro hemisferio”, afirmó Jorge Arturo Reyes, ministro consejero de la misión de Venezuela.
La resolución hace otro llamamiento a la Asamblea General de la ONU para que examine el problema colonial de Puerto Rico de “manera amplia” y se pronuncie sobre el tema “lo antes posible”, y observó “con preocupación” cómo la ley Promesa, que impuso una Junta de Supervisión Fiscal (JSF), incrementó la subordinación de Puerto Rico a Estados Unidos.
Wilma Reverón Collazo, del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano (MINH) y experta en el caso político de la isla, advirtió a El Nuevo Día que, en la resolución de 1953 que eximió a Estados Unidos de la obligación de rendir informes sobre la falta de gobierno propio en Puerto Rico, la Asamblea General de la ONU dejó la puerta abierta para retomar el debate si “cualquiera de las partes en la asociación concertada de común acuerdo” desea “modificar los términos”.
Los ponentes incluyeron al representante del Partido Nuevo Progresista (PNP) José Enrique Meléndez; al secretario general del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Juan Dalmau Ramírez; al exgobernador Ricardo Rosselló Nevares y al expresidente del Colegio de Abogados y Abogadas Eduardo Villanueva.
Esta vez, cerca de una tercera parte de los peticionarios defendió la estadidad. La sesión, que en sus inicios se extendía por dos semanas y en años recientes casi todo un día, duró solo tres horas.
Dalmau Ramírez, pasado candidato del PIP a la gobernación, reafirmó el reclamo para que la discusión vuelva a la Asamblea General de la ONU. “Si bien es cierto que nos corresponde a los actores del proceso político puertorriqueño la tarea de forzar al Congreso y al gobierno de EE.UU. a descargar su responsabilidad descolonizadora... no es menos cierto que la comunidad internacional tiene los instrumentos y la responsabilidad de propiciar condiciones que estimulen a EE.UU. al cumplimiento de sus obligaciones conforme a la resolución 1514 (XV)”, indicó.
“FLAGRANTE INCUMPLIMIENTO”
El líder independentista afirmó que, si la Asamblea General de la ONU reabre el caso colonial de Puerto Rico, “sería una poderosa y eficaz presión moral y jurídica sobre Estados Unidos para que el Congreso y el gobierno de ese país no pudieran continuar utilizando pretextos y excusas para permanecer en flagrante incumplimiento de sus obligaciones descolonizadoras bajo el derecho internacional”.
Meléndez –a nombre de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC)– destacó el borrador de legislación que se quiere convertir en un proyecto de ley para convocar a un plebiscito federal vinculante entre la estadidad, la independencia y la libre asociación, y elogió que excluya el status colonial vigente.
“Esta importante organización internacional no tiene entre su lista oficial de colonias a Puerto Rico porque... aceptó como bueno un invento, que evidentemente no es estado, no es libre y tampoco es asociado. No reconocer este evento como un error histórico de esta organización, simplemente, es tratar de tapar el cielo con la mano.”, afirmó Meléndez.
La presencia de Rosselló Nevares –quien fue electo en 2021 para cabildear en el Congreso por la estadidad para Puerto Rico– generó críticas de sectores independentistas, y varios se retiraron de la sala de conferencias cuando testificó.
“El momento de actuar ha llegado”, dijo el exgobernador Rosselló Nevares, al exhortar al Comité de Descolonización a hacer válidas las resoluciones que aprueba y respaldar los esfuerzos del Congreso para regular un plebiscito federal.
“En esta limitada ventana de oportunidad, defiendo la estadidad, la democracia, igualdad y el poder de elegir”, sostuvo Rosselló Nevares, quien renunció a su puesto en el verano de 2019, después de multitudinarias protestas por actos de corrupción en su administración y la publicación de un chat en el que, junto a asesores, se burlaba de sectores del pueblo.
Al testificar la ex primera dama Beatriz Rosselló , esposa de Rosselló Nevares, peticionarios independentistas volvieron a dejar el salón de conferencias.
Benjamín Ramos, de Pro Libertad Freedom Campaign, fue uno de los ponentes que denunció la presencia de Rosselló Nevares como un “insulto”.
Mientras, Normahiram Pérez, del colectivo “Llamado a la acción en Puerto Rico”, entre otras cosas, censuró la imposición de la JSF, “que se ha encargado de despoblar el archipiélago promoviendo el desplazamiento”.
“No es un asunto interno de Estados Unidos. Incumbe al Comité de Descolonización y toda la comunidad internacional”
PEDRO LUIS PEDROSO
EMBAJADOR DE CUBA ANTE LAS NACIONES UNIDAS