Más de mil muertos en terremoto
Con una magnitud de 5.9, se trata de la peor catástrofe registrada en el país asiático en décadas, según el gobierno
KABUL.- Más de mil personas murieron y otras 1,500 resultaron heridas en el terremoto de magnitud 5.9 que sacudió anteanoche el este de Afganistán, donde en el distrito más afectado el 70% de las viviendas quedaron destruidas o dañadas, mientras los equipos de rescate aún trataban, al cierre de esta edición, de localizar a supervivientes bajo los escombros.
El sismo sorprendió a la gente mientras dormía, con escaso tiempo para huir al exterior de sus viviendas de adobe en las remotas provincias orientales de Khost, donde se registró el epicentro, o Paktika, la más afectada por la tragedia.
El número de fallecidos ascendió ayer a 1,030, pero las autoridades advirtieron que las cifras podrían aumentar a medida que avancen las labores de rescate. Mientras, como manda la tradición islámica, los entierros masivos comenzaron, sin tiempo a velar al cadáver.
El Departamento de Información y Cultura de Paktika aseguró a la agencia de noticias estatal afgana Bakhtar que, solo en los distritos de Gayan y Barmal de esa provincia, más de 1,000 personas murieron y más de 1,500 resultaron heridas, sin aportar más detalles.
Además, previamente un portavoz del Ministerio de Gestión y Respuesta de Desastres afgano, Mohammad Nasim Haqqani, dijo a Efe que, en Khost, habían muerto 25 personas, mientras que, en la provincia oriental de Nangarhar, fallecieron otras cinco.
El terremoto sucedió cerca de la frontera con Pakistán, donde, al menos, una persona murió “al derrumbarse el techo de su casa”, dijo a Efe Taimoor Ali, portavoz de la Autoridad de Gestión de Desastres de la provincia paquistaní de Khyber Pakhtunkhwa, donde se produjo el suceso.
TALIBANES MOVILIZAN RECURSOS
El gobierno de los talibanes ordenó poner todos sus recursos a disposición para atender a los afectados en la peor catástrofe registrada en el país en décadas.
El máximo líder de los talibanes, el mulá Hibatullah Akhundzada, dio instrucciones “al Ministerio de Gestión de Desastres, los funcionarios pertinentes, gobernadores provinciales y al pueblo afgano a utilizar todos sus recursos para llegar a las familias de las víctimas, sacar a los muertos y llevar heridos al hospital”.
El Emirato Islámico (nombre oficial del régimen de los talibanes afganos) hizo, además, un llamamiento a la comunidad internacional y a las organizaciones humanitarias “para que ayuden a las familias de las víctimas en este gran desastre y brinden la mayor asistencia posible”, añadió el comunicado.
Varias organizaciones humanitarias ya trabajan sobre el terreno en coordinación con las autoridades locales para tratar de rescatar a posibles supervivientes de la catástrofe y atender a los afectados, informó en un comunicado la Oficina de la ONU para la para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
La tragedia castigó sobre todo a Gayan, en Paktika, donde, según la OCHA, “hasta 1,800 viviendas resultaron destruidas o dañadas (...) lo que representa el 70%” de las edificaciones de ese distrito.
Para acelerar las labores de rescate y el traslado de heridos a los hospitales más cercanos, cinco helicópteros del ministerio de Defensa afgano, más de 50 ambulancias y múltiples equipos de trabajadores sanitarios fueron desplegados en Paktika y Khost.
Sin embargo, las fuertes lluvias y el viento que azotan la zona no permitieron que varios de los helicópteros aterrizaran ayer en la tarde, continuó la OCHA, por lo que el traslado de los heridos a los centros hospitalarios se llevó a cabo por carreteras convencionales que fueron sido cortadas al tráfico privado.
ESTADOS UNIDOS BARAJA AYUDAS
Desde Washington, el presidente estadounidense, Joe Biden, ordenó a las agencias humanitarias de su país que evalúen opciones para ayudar a los damnificados en el terremoto en Afganistán.
El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, informó en un comunicado que Biden está siguiendo los acontecimientos en Afganistán y que solicitó a la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID, en inglés) y a otros organismos federales que examinen las opciones de respuesta para asistir a los afectados por el sismo.
“Estados Unidos está profundamente entristecido al ver el terremoto devastador que se ha cobrado las vidas de, al menos, 1,000 personas en Afganistán”, dijo Sullivan, quien recordó que su país es el principal donante individual de ayuda humanitaria a Afganistán.
Afirmó que los socios humanitarios de EE.UU. ya están ofreciendo atención médica y suministros para dar cobijo a los afganos sobre el terreno.
Sullivan expresó el compromiso del gobierno de Washington para apoyar a la hora de responder a las necesidades del “pueblo afgano” ante “esta tragedia terrible”.
“(Instruyo a) los funcionarios pertinentes, gobernadores y el pueblo afgano a utilizar todos sus recursos para llegar a las familias de las víctimas, sacar a los muertos y llevar heridos al hospital” HIBATULLAH AKHUNDZADA MÁXIMO LÍDER DE LOS TALIBANES
“TOTALMENTE MOVILIZADA” LA ONU
Mientras, la ONU está “totalmente movilizada” en Afganistán para proveer ayuda tras el terremoto, dijo ayer el secretario general, António Guterres.
En un comunicado, indicó sentirse muy apenado por el pueblo afgano, “que ya sufre el impacto de años de conflicto, estrechez económica y hambre”, pero destacó que “nuestros equipos están ya en el terreno evaluando las necesidades y proveyendo asistencia de emergencia”.
Pidió a la comunidad internacional que ayude a los miles de familias afectadas por el terremoto, porque “ahora es el momento de la solidaridad”.