DRNA autoriza poda de árboles y centros de acopio
La secretaria Anaís Rodríguez Vega firmó una orden administrativa para flexibilizar asuntos bajo jurisdicción de la agencia
Para acelerar la recuperación tras el paso del huracán Fiona, la secretaria del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Anaís Rodríguez Vega, emitió una orden administrativa para flexibilizar disposiciones de varios asuntos bajo jurisdicción de la agencia, como el corte y poda de árboles y el establecimiento de centros de acopio temporales para desperdicios sólidos no peligrosos.
La orden administrativa 2022-13, de la que El Nuevo Día obtuvo copia, fue firmada el domingo, tras la declaración del gobernador Pedro Pierluisi, un día antes, de un estado de emergencia en Puerto Rico por el ciclón.
Rodríguez Vega eximió del proceso de permiso para podar, “y de ser necesario, cortar” árboles que representen una situación de riesgo o emergencia. Esta autorización estará vigente hasta el 10 de octubre.
Igualmente, autorizó a los gobiernos municipales a establecer centros o lugares de acopio temporales para la acumulación de desperdicios sólidos no peligrosos hasta el 1 de noviembre. Los centros podrán recibir residuos hasta el 30 de noviembre.
Según la orden, en los centros, solo se podrá acopiar escombros de construcción y demolición, material vegetativo, colchones (“mattresses”), electrodomésticos, muebles, fango y material mojado por las inundaciones. Todo material deberá estar segregado y ninguno podrá estar ubicado directamente sobre el suelo, sino sobre superficies en concreto o cubiertas que eviten la percolación al terreno.
“Se prohíbe acumular desperdicios domésticos, biomédicos, industriales, animales muertos, alimentos ni ningún otro desperdicio con capacidad de descomponerse”, estableció Rodríguez Vega en el documento.
Los centros deberán estar ubicados a no menos de 300 pies de distancia de residencias, escuelas, cuidos de niños, ancianos o personas con diversidad funcional, alcantarillados, áreas de captación de cuerpos de agua u otras zonas sensitivas. No podrán ubicarse en zonas inundables, lugares con pendientes o que puedan ser arrastrados por escorrentías. Por lo tanto, deberán situarse en zonas o lugares de fácil acceso y en predios cerrados, “en la medida que sea posible”.
Los gobiernos municipales que quieran establecer estos centros de acopio deberán notificar por escrito al DRNA en un término no mayor de cinco días, a partir de la firma de la orden. Será responsabilidad de los ayuntamientos supervisar y monitorear la operación de los centros, y también deberán tener un registro de los desperdicios que acopien.
Por otro lado, Rodríguez Vega autorizó a personas o entidades sin permiso a recolectar y transportar desperdicios no peligrosos hasta los lugares de acopio avalados por los municipios. Esa autorización estará vigente hasta el 1 de noviembre.
“Exhorto a los alcaldes y a transportistas utilizar este instrumento para levantar nuevamente a Puerto Rico y alcanzar los niveles de normalidad que merecemos”, dijo en un comunicado.
También, la secretaria dispensó de permisos el uso de generadores “mientras dure la interrupción del servicio eléctrico por causa del fenómeno atmosférico” hasta el 15 de octubre.